-¡Por fin!- dijo Laura levantándose cuando sonó el timbre marcando el final de las clases de la tarde- ¡Venga, Nieves! Te veo lenta.
-Ya voy ya voy- dijo la chica guardando los libros en la mochila mientras bajaban las escaleras.- Espera, dejamos las cosas en la taquilla, ¿No?
-Es verdad.
Volvieron a subir a contracorriente y guardaron las cosas en la taquilla. Llegaron a la parada del bus y esperaron a que llegara el autobús número 64.
Mientras tanto en el hospital los cuatro chicos estaban callados. No entendían muy bien la situación. A David siempre le había gustado Nieves y por eso no comprendía porque Carlos se lo había tomando tan mal, es verdad que habían sido novios pero lo habían dejado porque ÉL quiso, que se lo hubiera pensado mejor. Carlos a su vez estaba enfadado de que David fuera capaz de admitir en su cara que aún le gustaba Nieves, ¡Habían sido novios hasta hacía nada! Eso no se le hacía a un amigo, porque eran amigos, ¿No? Blas estaba en la cama pensando el Álvaro y Laura, él siempre se había metido con ella, ¿Porqué ahora de repente tiene tanto interés en ella? Es la ex de los dos pero antes de él mismo y lo dejaron como amigos y además por razones ajenas, no por desconfianza que era la base de una relación. Álvaro por último estaba con el móvil aunque no hacía nada en particular, le fastidiaba que Blas quisiera volver con Laura, ¿No lo habían dejado hacía casi tres semanas?
Tres semanas. Menos de un mes de curso. En ese momento los cuatro chicos se dieron cuenta de todo lo que había pasado en menos de 30 días. ¿Cómo estarían entonces las cosas por Navidad?
La puerta se abrió. Todos esperaban oír a Ana con su "Sentaooos pequeños Einsteins míos" pero en cambio entraron Nieves y Laura.
-¿Ya habéis comido?- dijo Nieves abrazando a David.
-Sí- dijo el chico sonriendo de oreja a oreja.
-¿Y Dani y Ana?- preguntó Álvaro molesto de ver a Laura cuando Blas casi le tiró encima de él al abrazarla.
-Bueno, ya tu sabéh- explicó Laura riendo- querían hacer cosas de novios y aquí no podían así que nos han cambiado el día.
-Adiós- dijo Nieves sonriendo.
-No me parece justo- dijo Carlos indignado.
-Pues a mí sí, ¿Y a ti, Blas?- dijo David con una sonrisa de triunfo.
-A mí me parece genial- Blas sonrió a Álvaro
martes, 22 de mayo de 2012
lunes, 21 de mayo de 2012
Cap.176
-¿Qué pasa, parejita feliz? -saludó Nieves.
La pareja se miró y se dio un pequeño beso.
-Que asco -dijo Laura con cara de asco.
-¿Habéis venido para decirnos que damos asco? -preguntó Dani.
-No, la verdad es que no -dijo Nieves.
-Pero lo dais -dijo Laura.
-CIERRA LA BOCA -dijo Nieves.
-Perdón..
-¿Qué queréis? -preguntó Ana.
-Es que os tenemos que pedir un favor -comenzó Laura.
-Sí, queremos que nos cambies el turno para quedarnos con Blas y David -continuó hablando Nieves.
La pareja se miró y se quedo pensando unos segundos.
Mientras a kilómetros del instituto, los cuatro chicos seguían hablando.
-Por favor, pero si no les gustáis -dijo Álvaro entre risas.
-¿Y eso tú como lo sabes? -preguntó David.
-Porque es obvio, les gustamos nosotros -contestó Carlos con un tono de superioridad.
-Pues eso habrá que verlo -dijo Blas desafiante.
-Lo veremos -dijo Álvaro- ellas están loquitas por nosotros y lo tenéis que admitir.
-Pues perdona, pero cuando ni os saludan ni os miran muy loquitas no tienen que estar -contestó Blas.
-Sobre todo cuando ellas duermen con nosotros -ayudó David- en la misma cama y ABRAZADOS.
En el instituto la pareja seguía pensando si dejar a las chicas, pero les daban pena así que les dejaron. Las chicas tenían muy claro lo que querían que pasará en la habitación del hospital. Blas y David no sabían que las chicas iba a ir, pero con la discusión que habían tenido con Álvaro y Carlos tenían claro que iba a pasar nen cuanto las vieran.
La pareja se miró y se dio un pequeño beso.
-Que asco -dijo Laura con cara de asco.
-¿Habéis venido para decirnos que damos asco? -preguntó Dani.
-No, la verdad es que no -dijo Nieves.
-Pero lo dais -dijo Laura.
-CIERRA LA BOCA -dijo Nieves.
-Perdón..
-¿Qué queréis? -preguntó Ana.
-Es que os tenemos que pedir un favor -comenzó Laura.
-Sí, queremos que nos cambies el turno para quedarnos con Blas y David -continuó hablando Nieves.
La pareja se miró y se quedo pensando unos segundos.
Mientras a kilómetros del instituto, los cuatro chicos seguían hablando.
-Por favor, pero si no les gustáis -dijo Álvaro entre risas.
-¿Y eso tú como lo sabes? -preguntó David.
-Porque es obvio, les gustamos nosotros -contestó Carlos con un tono de superioridad.
-Pues eso habrá que verlo -dijo Blas desafiante.
-Lo veremos -dijo Álvaro- ellas están loquitas por nosotros y lo tenéis que admitir.
-Pues perdona, pero cuando ni os saludan ni os miran muy loquitas no tienen que estar -contestó Blas.
-Sobre todo cuando ellas duermen con nosotros -ayudó David- en la misma cama y ABRAZADOS.
En el instituto la pareja seguía pensando si dejar a las chicas, pero les daban pena así que les dejaron. Las chicas tenían muy claro lo que querían que pasará en la habitación del hospital. Blas y David no sabían que las chicas iba a ir, pero con la discusión que habían tenido con Álvaro y Carlos tenían claro que iba a pasar nen cuanto las vieran.
viernes, 18 de mayo de 2012
Cap. 175
-Buenos días- dijo Álvaro sonriendo.- Bonitos los miércoles, ¿Eh?
-Hola...- dijo Laura.
-Hombre, chicas, ya habéis subido- dijo llegando Carlos y sonriendo.
-Estaréis cansadas- Álvaro se puso en pie- Comprendemos que os queráis ir.
-No nos vamos.- cortó Nieves.
-No hace falta que te molestes, Nieves- dijo Carlos.
-No es molestia.
-Blas, nos toca a nosotros.- se quejó Álvaro.
-Ya pero...- Blas no pudo acabar la frase.
-Y David- exigió Carlos.- Ahora ellas se tienen que ir.
-Visto así...
-Pues ya está- Álvaro miró a Laura y sonrió- Adiós.
Las chicas cogieron sus cosas indignadas y se fueron sin despedirse de ninguno de los chicos. Cuando se quedaron solos en la habitación. Continuaron hablando.
-¿Por dónde íbamos?- dijo Carlos sentándose al lado de Álvaro en el sofá.
-Por mí- dijo Blas- Es cierto que pueda volver a... Bueno, gustarme- Confesó.
-¿Y tú aún no lo has superado?- Preguntó de nuevo Carlos, pero esta vez a David.
-No- dijo finalmente David.
Mientras tanto las chicas estaban en el autobús enfadas y sin hablar. Vale, esa noche se quedaban los chicos con ellos pero mañana era un día nuevo.
-Pero, ¿El Jueves no les toca a Ana y Dani?- dijo entonces Laura.
-Es verdad...- Se lo cambiamos por el viernes.
-Vale.
Las chicas fueron a clase a las diez. Cuando entraron un grupo de fans les esperaba en la puerta.
-¿Cómo está Blas?
-¡¡David!! ¿Qué le ha pasado a David?
-¿Y Carlos? ¿Está en el hospital? Tiene taaan buen corazón...
-¿Os imaginais a Álvaro con la bata de enfermo? Grr que sexy jajaja
-Me va a reventar la cabeza- dijo Laura ante tanta pregunta idiota.
-Bueno, sólo quedan cuatro clases...
Vieron al fondo a Ana y Dani y fueron a pedirles un cambio de turno para pasar la noche con los chicos.
-Hola...- dijo Laura.
-Hombre, chicas, ya habéis subido- dijo llegando Carlos y sonriendo.
-Estaréis cansadas- Álvaro se puso en pie- Comprendemos que os queráis ir.
-No nos vamos.- cortó Nieves.
-No hace falta que te molestes, Nieves- dijo Carlos.
-No es molestia.
-Blas, nos toca a nosotros.- se quejó Álvaro.
-Ya pero...- Blas no pudo acabar la frase.
-Y David- exigió Carlos.- Ahora ellas se tienen que ir.
-Visto así...
-Pues ya está- Álvaro miró a Laura y sonrió- Adiós.
Las chicas cogieron sus cosas indignadas y se fueron sin despedirse de ninguno de los chicos. Cuando se quedaron solos en la habitación. Continuaron hablando.
-¿Por dónde íbamos?- dijo Carlos sentándose al lado de Álvaro en el sofá.
-Por mí- dijo Blas- Es cierto que pueda volver a... Bueno, gustarme- Confesó.
-¿Y tú aún no lo has superado?- Preguntó de nuevo Carlos, pero esta vez a David.
-No- dijo finalmente David.
Mientras tanto las chicas estaban en el autobús enfadas y sin hablar. Vale, esa noche se quedaban los chicos con ellos pero mañana era un día nuevo.
-Pero, ¿El Jueves no les toca a Ana y Dani?- dijo entonces Laura.
-Es verdad...- Se lo cambiamos por el viernes.
-Vale.
Las chicas fueron a clase a las diez. Cuando entraron un grupo de fans les esperaba en la puerta.
-¿Cómo está Blas?
-¡¡David!! ¿Qué le ha pasado a David?
-¿Y Carlos? ¿Está en el hospital? Tiene taaan buen corazón...
-¿Os imaginais a Álvaro con la bata de enfermo? Grr que sexy jajaja
-Me va a reventar la cabeza- dijo Laura ante tanta pregunta idiota.
-Bueno, sólo quedan cuatro clases...
Vieron al fondo a Ana y Dani y fueron a pedirles un cambio de turno para pasar la noche con los chicos.
Cap.174
-Señor Lafuente, su desayuno -dijo una enfermera entrando con una bandeja en la mano, se la dejó encima de sus piernas y se fue.
Nieves ya se había levantado, estaba en el baño haciendo sus cosas.
Laura abrió el sobre y solamente veía números y letras.
-No entiendo nada -dijo Laura mirando las hojas.
En ese momento entró una enfermera con otra bandeja en la mano.
-Señor Cantó, su desayuno -dijo haciendo lo mismo que la otra enfermera.
-Espere, espere -dijo Laura- Mire estos análisis y dígame qué le pasa.
La enfermera miró todos los papeles.
-No le pasa nada -dijo la enfermera- está sano. Lo único es que tienes un poco alta la tensión pero nada más -dicho esto la enfermera se fue.
Nieves salió del baño, las dos chicas se vistieron y bajaron a desayunar ellas también. Al parecer hoy tampoco tenían pensado ir a clase, tampoco es que tuvieran muchas ganas.
-¿Qué hay entre tú y Blas? -le preguntó Nieves a su amiga
-Nada -dijo Laura riéndose.
-No que va -ironizó Nieves.
-Bueeeeeno, a lo mejor algo hay.
-Vamos que habéis vuelto.
-No, de momento no.
-Pero tú quieres ¿o me equivoco? -preguntó Nieves riéndose.
-No, no te equivocas -le contestó su amiga de la misma forma.
Las dos se quedaron riéndose y hablando, se confesaron que a Laura le seguía gustando Blas y que quería volver con él y Nieves confesó que le gustaba David.
Las dos subieron a la habitación, pero cuando entraron se encontraron con alguien que ninguna de las dos tenía muchas ganas de ver.
Nieves ya se había levantado, estaba en el baño haciendo sus cosas.
Laura abrió el sobre y solamente veía números y letras.
-No entiendo nada -dijo Laura mirando las hojas.
En ese momento entró una enfermera con otra bandeja en la mano.
-Señor Cantó, su desayuno -dijo haciendo lo mismo que la otra enfermera.
-Espere, espere -dijo Laura- Mire estos análisis y dígame qué le pasa.
La enfermera miró todos los papeles.
-No le pasa nada -dijo la enfermera- está sano. Lo único es que tienes un poco alta la tensión pero nada más -dicho esto la enfermera se fue.
Nieves salió del baño, las dos chicas se vistieron y bajaron a desayunar ellas también. Al parecer hoy tampoco tenían pensado ir a clase, tampoco es que tuvieran muchas ganas.
-¿Qué hay entre tú y Blas? -le preguntó Nieves a su amiga
-Nada -dijo Laura riéndose.
-No que va -ironizó Nieves.
-Bueeeeeno, a lo mejor algo hay.
-Vamos que habéis vuelto.
-No, de momento no.
-Pero tú quieres ¿o me equivoco? -preguntó Nieves riéndose.
-No, no te equivocas -le contestó su amiga de la misma forma.
Las dos se quedaron riéndose y hablando, se confesaron que a Laura le seguía gustando Blas y que quería volver con él y Nieves confesó que le gustaba David.
Las dos subieron a la habitación, pero cuando entraron se encontraron con alguien que ninguna de las dos tenía muchas ganas de ver.
miércoles, 16 de mayo de 2012
Cap. 173
Cuando se fue haciendo de noche las chicas corrieron la cortina y cada una se tumbó con uno de los chicos. Nieves se acomodó como aquella tarde junto a David. La verdad es que aún recordaba lo de las chicas de su clase, pero prefería no pensar en ello. David le rodeó con el brazo que no llevaba gotero y acomodó su cabeza.
En la otra parte de la cortina Laura estaba casi dormida pero habían cosas que no le dejaban tranquila. Estaba también tumbada junto a Blas, que estaba prácticamente dormido y le acariciaba el brazo. Ella pensaba en Carlos y Álvaro y todo lo que había pasado, y sus dos compañeras de clase. Se habían enfadado con ellos por los celos cuando ellas se ponían celosas de sus fans y también les culpaban.
Bastante lejos de allí, en un cuarto lleno de gorros y sombreros colgando por todos lados, Carlos estaba mirando sus fotos de Tuenti. Nieves, Nieves, Nieves. Le había costado mucho luchar contra David y al final parecía que había ganado él, pero ahora las cosas estaban patas arriba. ¿Y si era una estrategia de él? Pero si eran amigos.. O quizá nunca lo fueron. Demasiadas preguntas. La verdad era que lo que menos le apetecía en esos momentos era pensar que al día siguiente iba a estar en cuatro paredes con él.
Álvaro por su parte estaba tumbado boca arriba aún con la ropa de calle. No tenía sentido. Nada. Todo le iba bien con Laura, ¿Por qué lo dejaron? Ah claro, Edu. Edu y Borja. Esa era la clave, seguro que era culpa de esos dos. Si no se hubieran metido por medio como lo hicieron desde el principio nada de eso hubiera pasado. Pero no iba a quedar así la cosa, era Álvaro Gango, y era el chico malo de la clase. Vale que Blas fuera más popular, pero él siempre se había considerado más guapo, y más creído.
Cuando empezaba a salir el sol dos enfermeras entraron a la habitación 456.
-A ver, por favor, depsierten- dijo una.
-Tenemos que trabajar.- dijo la otra mirando los goteros.
-Señor Cantó, tenemos los resultados de los análisis.
-¿Y cómo han salido?- Dijo con voz baja, Laura aún dormía.
-A ver, esterilizo la aguja y le saco un poco de sangre, ¿Correcto?- decía la otra enfermera sonriente a David.
-Claro, claro...
-¿Es amiga suya?- dijo la enfermera mirando a Nieves que dormía.
-Sí...
La enfermera no dijo nada, solo subió los hombros y le pinchó.
-Le dejo los resultados aquí para que los revise.- le dijo la enfermera a Blas dejándole los papeles al lado de la cama.
En la otra parte de la cortina Laura estaba casi dormida pero habían cosas que no le dejaban tranquila. Estaba también tumbada junto a Blas, que estaba prácticamente dormido y le acariciaba el brazo. Ella pensaba en Carlos y Álvaro y todo lo que había pasado, y sus dos compañeras de clase. Se habían enfadado con ellos por los celos cuando ellas se ponían celosas de sus fans y también les culpaban.
Bastante lejos de allí, en un cuarto lleno de gorros y sombreros colgando por todos lados, Carlos estaba mirando sus fotos de Tuenti. Nieves, Nieves, Nieves. Le había costado mucho luchar contra David y al final parecía que había ganado él, pero ahora las cosas estaban patas arriba. ¿Y si era una estrategia de él? Pero si eran amigos.. O quizá nunca lo fueron. Demasiadas preguntas. La verdad era que lo que menos le apetecía en esos momentos era pensar que al día siguiente iba a estar en cuatro paredes con él.
Álvaro por su parte estaba tumbado boca arriba aún con la ropa de calle. No tenía sentido. Nada. Todo le iba bien con Laura, ¿Por qué lo dejaron? Ah claro, Edu. Edu y Borja. Esa era la clave, seguro que era culpa de esos dos. Si no se hubieran metido por medio como lo hicieron desde el principio nada de eso hubiera pasado. Pero no iba a quedar así la cosa, era Álvaro Gango, y era el chico malo de la clase. Vale que Blas fuera más popular, pero él siempre se había considerado más guapo, y más creído.
Cuando empezaba a salir el sol dos enfermeras entraron a la habitación 456.
-A ver, por favor, depsierten- dijo una.
-Tenemos que trabajar.- dijo la otra mirando los goteros.
-Señor Cantó, tenemos los resultados de los análisis.
-¿Y cómo han salido?- Dijo con voz baja, Laura aún dormía.
-A ver, esterilizo la aguja y le saco un poco de sangre, ¿Correcto?- decía la otra enfermera sonriente a David.
-Claro, claro...
-¿Es amiga suya?- dijo la enfermera mirando a Nieves que dormía.
-Sí...
La enfermera no dijo nada, solo subió los hombros y le pinchó.
-Le dejo los resultados aquí para que los revise.- le dijo la enfermera a Blas dejándole los papeles al lado de la cama.
Cap.172
-Pues ya los habéis visto -dijo Nieves- así que adiós.
-¿Y si no queremos irnos? -preguntó la amiga de la voz de marciano.
-Llamamos a las enfermeras -les amenazó Laura.
-Será mejor que os vayáis -dijo Blas.
Las dos chicas se despidieron y salieron de la habitación.
-¿Qué hacían ellas aquí? -preguntó Laura.
-Solo nos estaban visitando -se excusó Blas.
-Si claro -ironizó Nieves- Vamos, por favor, si solo les faltaba bajarse las bragas
Lo que ninguno de los cuatro sabía, era que esas chicas no estaban en la habitación por casualidad..
-Ya está hecho -dijo la voz de marciano hablando por teléfono con alguien.
-¿Os han visto? -contestó.
-Sí, pero los chicos no querían. Solo nos han visto encima de ellos, casi besándolos.
-Mal, el trato era que teníais que estar casi enrollándoos juntos.
-Pero no nos ha dado tiempo -el de la otra línea colgó.
-Esto está mal -dijo Carlos.
-Estábamos de acuerdo, Carlos -dijo Álvaro- les hemos pagado para que las encontraran enrollándose con ellos, ha fallado un poco pero bueno.
-No se van a olvidar de ellas
-¿Y tú cómo lo sabes? -le preguntó Álvaro enfadado
-No lo sé, tío -dijo Carlos, y se fue a su casa.
Las chicas no querían seguir discutiendo por las guarras esas. Estaban hartas de todas las "fans" que se metían con ellas por lo de la fiesta y porque tenían envidia de que ellas podían salir con alguno de Auryn y las otras no.
Cap. 171
-No nos hagáis esto- dijo Blas mirando hacia otro lado.
-No, es la única forma de terminar ésto- dijo Carlos cruzando los brazos.
Blas y David se miraron.
-A ver, vosotros- Empezó David- Os quedastéis el otro día y ellas no dijeron nada.
-Pero si os vais a poner así...- dijo Blas subiendo los hombros.
Álvaro ya no aguantaba más, le pitaban los oídos. Asintió con la cabeza apretando los labios y salió. No quería pasar otro minuto allí. Carlos miró a Nieves y se fue. En la habitación se quedaron todos en silencio. Pero en seguida vino una enfermera con la cena.
-Cenar algo vosotras- dijo Blas.
-Ahora bajaremos a la cafetería y nos compraremos algo para llevar- dijo Laura.
Nieves miró a su amiga y la cogió del brazo, fueron hacia la puerta.
-Mejor lo compramos ya, ahora volvemos- le guiñó e ojo a David y salieron.
Bajaron más o menos en silencio hasta la cafetería. Pidieron unos bocatas en la cafetería. Mientras esperaban a que se los dieran para pagar Laura rompió el silencio.
-No sé que les pasa a esos dos...
-¿Carlos y Álvaro?
-Sí.
-Celos- dijo levantando los hombros- o eso creo yo...
-No sé...
Pagaron y fueron hacia la habitación, antes de entrar por vieron que la puerta estaba abierta, raro porque ellas habían cerrado y las enfermeras hacían lo mismo. Se acercaron a la pared para ver is oían algo. Eran dos chicas, además de clase.
-¿Qué hacen esas ahí?- dijo Nieves en voz baja.
-Vamos.
Las chicas entraron y vieron a las dos compañeras casi encima de ellos.
-Hola- dijo Laura bien alto y se sentó entre su compañera y Blas.- ¿Qué pasa?- sonrió.
-Eso eso- Nieves apartó con "suavidad" a la otra chica y se sentó ella en su lugar.
-Hemos venido a verlos- dijo una de ellas que hablaba con voz de marciano.
-Aaaam ya...
-No, es la única forma de terminar ésto- dijo Carlos cruzando los brazos.
Blas y David se miraron.
-A ver, vosotros- Empezó David- Os quedastéis el otro día y ellas no dijeron nada.
-Pero si os vais a poner así...- dijo Blas subiendo los hombros.
Álvaro ya no aguantaba más, le pitaban los oídos. Asintió con la cabeza apretando los labios y salió. No quería pasar otro minuto allí. Carlos miró a Nieves y se fue. En la habitación se quedaron todos en silencio. Pero en seguida vino una enfermera con la cena.
-Cenar algo vosotras- dijo Blas.
-Ahora bajaremos a la cafetería y nos compraremos algo para llevar- dijo Laura.
Nieves miró a su amiga y la cogió del brazo, fueron hacia la puerta.
-Mejor lo compramos ya, ahora volvemos- le guiñó e ojo a David y salieron.
Bajaron más o menos en silencio hasta la cafetería. Pidieron unos bocatas en la cafetería. Mientras esperaban a que se los dieran para pagar Laura rompió el silencio.
-No sé que les pasa a esos dos...
-¿Carlos y Álvaro?
-Sí.
-Celos- dijo levantando los hombros- o eso creo yo...
-No sé...
Pagaron y fueron hacia la habitación, antes de entrar por vieron que la puerta estaba abierta, raro porque ellas habían cerrado y las enfermeras hacían lo mismo. Se acercaron a la pared para ver is oían algo. Eran dos chicas, además de clase.
-¿Qué hacen esas ahí?- dijo Nieves en voz baja.
-Vamos.
Las chicas entraron y vieron a las dos compañeras casi encima de ellos.
-Hola- dijo Laura bien alto y se sentó entre su compañera y Blas.- ¿Qué pasa?- sonrió.
-Eso eso- Nieves apartó con "suavidad" a la otra chica y se sentó ella en su lugar.
-Hemos venido a verlos- dijo una de ellas que hablaba con voz de marciano.
-Aaaam ya...
Cap.170
-Nos toca a nosotros y punto -dijo Carlos corriendo la cortina.
-Que no -le contestó Nieves aún tumbada con David.
-Mirad, dejarlo no discutáis -dijo David.
-Eso, mejor lo decidís después -ayudó Blas.
Álvaro y Carlos se sentaron en el sofá. Miraban a los chicos. Sentían ¿celos? no estaban muy seguros, pero la verdad es que tenían algo de envidia.
-¿No tenéis calor? -preguntó Álvaro.
-¿Por qué lo dices? -contestó Blas.
-Porque estáis demasiado juntos y hace calor.
Laura no dijo nada. Sabía que si decía algo podrían acabar discutiendo y estaba cansada de tantas discusiones.
David le daba de vez en cuando algún beso en la mejilla a Nieves y eso a Carlos le ponía enfermo.
Pasaron la tarde, entraban enfermeras y salían, no hablaban mucho.
-Bueno ya es hora de que os vayáis -rompió el silencio Carlos.
-Nos iremos cuando queramos -le contestó Nieves.
-Ahora los que nos estáis echando sois vosotros -dijo al fin Laura.
-Es que ya es hora de que os vayáis -dijo Álvaro.
-Se os va a hacer tarde -apoyó Carlos.
-Ese es nuestro problema, no el vuestro -dijo Nieves.
-No empecéis a discutir, por favor -les riñó David.
Las chicas se levantaron, no aguantaban a Álvaro y a Carlos cuando se ponían en plan a la defensiva o en plan celosos. Ninguna de las dos entendía por qué se ponían celosos, pero los chicos lo hacían o por lo menos intentaban disimularlo. Empezaron a discutir los 4. Carlos y Álvaro querían evitar que las chicas se quedaran con los otros dos porque sabían que podían pasar cosas, y las chicas, por otra parte, querían quedarse se lo pasaba super bien con David y Blas.
-¡BASTA YA! -gritó Nieves- estoy harta de discusiones.
-La verdad es que sí -contestó Laura
-Sólo hay una opción -comenzó a hablar Nieves- Que elijan ellos -dijo mirando a Blas y a David- Vosotros dos, elegid quién queréis que se queden, ellos o nosotras
-Que no -le contestó Nieves aún tumbada con David.
-Mirad, dejarlo no discutáis -dijo David.
-Eso, mejor lo decidís después -ayudó Blas.
Álvaro y Carlos se sentaron en el sofá. Miraban a los chicos. Sentían ¿celos? no estaban muy seguros, pero la verdad es que tenían algo de envidia.
-¿No tenéis calor? -preguntó Álvaro.
-¿Por qué lo dices? -contestó Blas.
-Porque estáis demasiado juntos y hace calor.
Laura no dijo nada. Sabía que si decía algo podrían acabar discutiendo y estaba cansada de tantas discusiones.
David le daba de vez en cuando algún beso en la mejilla a Nieves y eso a Carlos le ponía enfermo.
Pasaron la tarde, entraban enfermeras y salían, no hablaban mucho.
-Bueno ya es hora de que os vayáis -rompió el silencio Carlos.
-Nos iremos cuando queramos -le contestó Nieves.
-Ahora los que nos estáis echando sois vosotros -dijo al fin Laura.
-Es que ya es hora de que os vayáis -dijo Álvaro.
-Se os va a hacer tarde -apoyó Carlos.
-Ese es nuestro problema, no el vuestro -dijo Nieves.
-No empecéis a discutir, por favor -les riñó David.
Las chicas se levantaron, no aguantaban a Álvaro y a Carlos cuando se ponían en plan a la defensiva o en plan celosos. Ninguna de las dos entendía por qué se ponían celosos, pero los chicos lo hacían o por lo menos intentaban disimularlo. Empezaron a discutir los 4. Carlos y Álvaro querían evitar que las chicas se quedaran con los otros dos porque sabían que podían pasar cosas, y las chicas, por otra parte, querían quedarse se lo pasaba super bien con David y Blas.
-¡BASTA YA! -gritó Nieves- estoy harta de discusiones.
-La verdad es que sí -contestó Laura
-Sólo hay una opción -comenzó a hablar Nieves- Que elijan ellos -dijo mirando a Blas y a David- Vosotros dos, elegid quién queréis que se queden, ellos o nosotras
Cap.169
-Pues supongo que ir a casa- dijo Carlos subiendo los hombros.
-Mañana vamos nosotros al hospital.
-Sí, mañana nos toca a nosotros... Podemos ir esta noche.
-Me parece bien.
Se despidieron y se fueron cada uno a su casa para hacer los deberes y dejar todo preparado, tenían que separar a las chicas de David y Blas. Pero no sabían muy bien por que. Ellos eran sus amigos, eran miembros de Auryn. Pero algunos sentimientos no se pueden reprimir.
//En el hospital//
-Buenas tardes, dormilona- dijo David sonriendo.
Nieves se había quedado dormida con él en la cama. La cortina seguía corrida. Ella le miró y sonrió mientras se frotaba los ojos.
-¿Qué hora és?
-Las cinco y algo.
-Estaba muy cómoda.
-Nadie ha dicho que te quitases- sonrió.
Mientras tanto en el otro lado de la cortina, Laura y Blas estaban hablando, riendo y mirando cosas con la Blackberry. Además estuvieron planeando qué hacer cuando al chico le dieran el alta.
-¿Te vas a quedar a dormir?- dijo el chico al final.
-Sí, dormiré con Nieves en el sofá cama ese.
-No hace falta, puedes dormir conmigo, me refiero, si quieres claro.
Laura se limitó a sonreír. Quería. Y bastante.
Sobre las ocho de la tarde cambiaron las sábanas a los chicos. Más tarde tocaron a la puerta, serían unas enfermeras o eso. Pero eran Álvaro y Carlos.
-¿Qué hacéis aquí?- Preguntó Nieves
-Venir a ver a nuestros amigos- respondió Carlos tranquilo.
-Pero si nos quedamos nosotras.
-Es verdad, es nuestro turno- dijo Laura molesta.- Vosotros venís mañana.
-No nos echéis- dijo Álvaro.
-No os están echando- dijo Blas subiendo los hombros.
Carlos y Álvaro se miraron.
-Mañana vamos nosotros al hospital.
-Sí, mañana nos toca a nosotros... Podemos ir esta noche.
-Me parece bien.
Se despidieron y se fueron cada uno a su casa para hacer los deberes y dejar todo preparado, tenían que separar a las chicas de David y Blas. Pero no sabían muy bien por que. Ellos eran sus amigos, eran miembros de Auryn. Pero algunos sentimientos no se pueden reprimir.
//En el hospital//
-Buenas tardes, dormilona- dijo David sonriendo.
Nieves se había quedado dormida con él en la cama. La cortina seguía corrida. Ella le miró y sonrió mientras se frotaba los ojos.
-¿Qué hora és?
-Las cinco y algo.
-Estaba muy cómoda.
-Nadie ha dicho que te quitases- sonrió.
Mientras tanto en el otro lado de la cortina, Laura y Blas estaban hablando, riendo y mirando cosas con la Blackberry. Además estuvieron planeando qué hacer cuando al chico le dieran el alta.
-¿Te vas a quedar a dormir?- dijo el chico al final.
-Sí, dormiré con Nieves en el sofá cama ese.
-No hace falta, puedes dormir conmigo, me refiero, si quieres claro.
Laura se limitó a sonreír. Quería. Y bastante.
Sobre las ocho de la tarde cambiaron las sábanas a los chicos. Más tarde tocaron a la puerta, serían unas enfermeras o eso. Pero eran Álvaro y Carlos.
-¿Qué hacéis aquí?- Preguntó Nieves
-Venir a ver a nuestros amigos- respondió Carlos tranquilo.
-Pero si nos quedamos nosotras.
-Es verdad, es nuestro turno- dijo Laura molesta.- Vosotros venís mañana.
-No nos echéis- dijo Álvaro.
-No os están echando- dijo Blas subiendo los hombros.
Carlos y Álvaro se miraron.
Cap.168
Álvaro y Carlos estaban en la puerta de clase, con más chicos, hablando hasta que sonó la campana. Todos entraron a clase.
-Pues al final no han venido -dijo Carlos.
-No -contestó Álvaro- crees que estarán..
-Supongo -dijo Carlos- Estarán en el hospital -se sentó en la silla.
Álvaro se fue a su sitio y se sentó.
//En el hospital//
A Blas y a David ya les habían llevado la comida, pero aún seguían con la cortina corrida, para separar a Blas y a David.
-¿Está bueno? -preguntó Nieves.
-Sí -contestó David con la boca llena de patatas- ¿Quieres? -le ofreció a la chica.
Nieves dijo que "sí" con la cabeza y David le dio de comer.
Laura no había esperado a que Blas le preguntará si quería, ella ya había cogido.
-¿Algo que contarme? -preguntó Blas.
-Pues la verdad es que no -dijo cogiendo una patata con la mano- No pasa nada interesante por la civilización.
-Pues imagínate, aquí si que no pasa nada interesante.
//En el instituto//
Las clases habían pasado más lentas de lo normal. Sobretodo porque a Álvaro y a Carlos no paraban de venirles preguntas a la cabeza. Cuando salieron del instituto se quedaron en la puerta hablando.
-¿Qué hacemos? -preguntó Álvaro.
-Pues al final no han venido -dijo Carlos.
-No -contestó Álvaro- crees que estarán..
-Supongo -dijo Carlos- Estarán en el hospital -se sentó en la silla.
Álvaro se fue a su sitio y se sentó.
//En el hospital//
A Blas y a David ya les habían llevado la comida, pero aún seguían con la cortina corrida, para separar a Blas y a David.
-¿Está bueno? -preguntó Nieves.
-Sí -contestó David con la boca llena de patatas- ¿Quieres? -le ofreció a la chica.
Nieves dijo que "sí" con la cabeza y David le dio de comer.
Laura no había esperado a que Blas le preguntará si quería, ella ya había cogido.
-¿Algo que contarme? -preguntó Blas.
-Pues la verdad es que no -dijo cogiendo una patata con la mano- No pasa nada interesante por la civilización.
-Pues imagínate, aquí si que no pasa nada interesante.
//En el instituto//
Las clases habían pasado más lentas de lo normal. Sobretodo porque a Álvaro y a Carlos no paraban de venirles preguntas a la cabeza. Cuando salieron del instituto se quedaron en la puerta hablando.
-¿Qué hacemos? -preguntó Álvaro.
martes, 15 de mayo de 2012
Cap.167
Laura fue al encuentro de su amiga.
-¿Pasa algo?
-Sí, Carlos y sus ataques de celos, cuando NO somos novios- la última parte la dijo suficientemente alto como para que el chico la oyera.
-Aaaammm... Ya...
-Es que estaba hablando por el móvil con David y aparece él y se pone que si con quien hablo, que si me río de él, uff
Las clases de la mañana pasaron, en el patio, Laura y Nieves fueron a su aire. A medío día en vez de ir a casa fueron al hospital. No aguantaban más.
-¿Dicen algo en clase?- Quiso saber Blas.
-Bueno, las guarr... Vuestras fans- corrigió a tiempo Nieves- están "muuuuy preocupadas".
-Pero no siquiera vienen a veros...- murmuró Laura.
Dani y Ana se despidieron y se fueron.
-Estos dos son más empalagosos...- rió David.
Llegaron dos enfermeras para curarles. Corrieron las cortinas que separaban las dos camas.
-¿Puedo quedarme con él?- Preguntó Nieves.
-Claro hija- dijo sonriendo la enfermera de David.
Al otro lado de la cortina, la enfermera sacaba líquidos y gasas. Cogió la manta de Blas y tiró hacia abajo, dejándola por la altura de la cintura. El chico no llevaba camiseta.
-Muy bien, señor Cantó- dijo- Vamos a curarle.
Blas levantó las cejas y tragó saliva.
Nieves se dio cuenta de que David le había cogido de la mano, se miraron y sonrieron aunque cuando la enfermera empezó a quitarle los esparadrapos se le borró de pronto.
-¿Te duele?- Preguntó Nieves.
-No, hace cosquillas- ironizó David, pero se volvieron a mirar y sonrieron.- Gracias por estar aquí, en serio...
-Señor Cantó, voy a hacerle un análisis de sangre- dijo la enfermera sacando la aguja.
-Pero...
-No hay escapatoria Blasito- Laura sonrió.
-No me gustan las agujas- se defendió.
-¿Te doy la mano?- ofreció la chica divertida.
Mientras tanto en clase, dos personas se extrañaron de no ver a Nieves y Laura
-¿Pasa algo?
-Sí, Carlos y sus ataques de celos, cuando NO somos novios- la última parte la dijo suficientemente alto como para que el chico la oyera.
-Aaaammm... Ya...
-Es que estaba hablando por el móvil con David y aparece él y se pone que si con quien hablo, que si me río de él, uff
Las clases de la mañana pasaron, en el patio, Laura y Nieves fueron a su aire. A medío día en vez de ir a casa fueron al hospital. No aguantaban más.
-¿Dicen algo en clase?- Quiso saber Blas.
-Bueno, las guarr... Vuestras fans- corrigió a tiempo Nieves- están "muuuuy preocupadas".
-Pero no siquiera vienen a veros...- murmuró Laura.
Dani y Ana se despidieron y se fueron.
-Estos dos son más empalagosos...- rió David.
Llegaron dos enfermeras para curarles. Corrieron las cortinas que separaban las dos camas.
-¿Puedo quedarme con él?- Preguntó Nieves.
-Claro hija- dijo sonriendo la enfermera de David.
Al otro lado de la cortina, la enfermera sacaba líquidos y gasas. Cogió la manta de Blas y tiró hacia abajo, dejándola por la altura de la cintura. El chico no llevaba camiseta.
-Muy bien, señor Cantó- dijo- Vamos a curarle.
Blas levantó las cejas y tragó saliva.
Nieves se dio cuenta de que David le había cogido de la mano, se miraron y sonrieron aunque cuando la enfermera empezó a quitarle los esparadrapos se le borró de pronto.
-¿Te duele?- Preguntó Nieves.
-No, hace cosquillas- ironizó David, pero se volvieron a mirar y sonrieron.- Gracias por estar aquí, en serio...
-Señor Cantó, voy a hacerle un análisis de sangre- dijo la enfermera sacando la aguja.
-Pero...
-No hay escapatoria Blasito- Laura sonrió.
-No me gustan las agujas- se defendió.
-¿Te doy la mano?- ofreció la chica divertida.
Mientras tanto en clase, dos personas se extrañaron de no ver a Nieves y Laura
lunes, 14 de mayo de 2012
Cap.166
Al día siguiente, Álvaro hizo lo mismo que todos los días, bajó y empezó a andar. Cuando llegó al patio de Laura se quedó esperando a que bajará, pero al ver que nadie bajaba, se fue.
Carlos bajó y justo vio a Nieves que estaba girando la esquina, él empezó a correr para intentar cogerla. Nieves iba hablando por teléfono ¿con quién? era la pregunta que se le pasaba a Carlos por la cabeza.
-Eres tonto, ¿cómo le dices eso? -preguntó Nieves entre risas.
Laura bajo, al ver que no estaba Álvaro, giró la esquina para ver si lo veía pero no había nadie. No sabía porque pensaba que iba a ir a recogerla, era una idiota. Empezó a andar hacia clase. Cuando llegó estaba Álvaro y dos de las "guarras" con él. Prefirió sentarse sola en su mesa, sacó la agenda y empezó a rayarla.
-Es que la gente es muy falsa -escuchó decir a una de las chicas.
-Y otras muy guarras -susurró Laura.
-Es que es eso, yo soy una de ella y me cambio de instituto corriendo -dijo la otra.
-Que bochorno en la fiesta que todo el mundo sepa lo que has hecho
-Dejar el tema -le suplicó Álvaro.
-Es la verdad, Alvarochu.
-¡SE ACABÓ! -gritó Laura, cerrando la agenda de un golpe y levantándose de la silla- ¿POR QUÉ NO OS METÉIS EN VUESTRAS VIDAS? Ah sí, porque vuestras vidas son una m*erda y aburridas por eso tenéis que meteros en la de los demás. OLVIDAROS DE MÍ Y DE NIEVES. Si os aburrís poneros a hacer ganchillo o os vais a ch*parla por ahí a alguno, pero dejáis mi vida en PAZ. -dicho esto se sentó otra vez en la silla- AH y una cosa más -se giró para mirarles a la cara- ¿Alvarochu? ¿En serio? Por favor exprimiros lo que tenéis sobre los hombros, que no sólo sirve para maquillarla y para peinarla, no, sirve para PENSAR, sí, PENSAR, y no, no es un pókemon.
La gente de clase iba entrando pero ella se fijó en dos que iban más serios de lo normal, Carlos y Nieves, se sorprendió que fueran juntos a clase, sobre todo por la conversación que habían tenido el día anterior sobre David y Blas.
Carlos bajó y justo vio a Nieves que estaba girando la esquina, él empezó a correr para intentar cogerla. Nieves iba hablando por teléfono ¿con quién? era la pregunta que se le pasaba a Carlos por la cabeza.
-Eres tonto, ¿cómo le dices eso? -preguntó Nieves entre risas.
Laura bajo, al ver que no estaba Álvaro, giró la esquina para ver si lo veía pero no había nadie. No sabía porque pensaba que iba a ir a recogerla, era una idiota. Empezó a andar hacia clase. Cuando llegó estaba Álvaro y dos de las "guarras" con él. Prefirió sentarse sola en su mesa, sacó la agenda y empezó a rayarla.
-Es que la gente es muy falsa -escuchó decir a una de las chicas.
-Y otras muy guarras -susurró Laura.
-Es que es eso, yo soy una de ella y me cambio de instituto corriendo -dijo la otra.
-Que bochorno en la fiesta que todo el mundo sepa lo que has hecho
-Dejar el tema -le suplicó Álvaro.
-Es la verdad, Alvarochu.
-¡SE ACABÓ! -gritó Laura, cerrando la agenda de un golpe y levantándose de la silla- ¿POR QUÉ NO OS METÉIS EN VUESTRAS VIDAS? Ah sí, porque vuestras vidas son una m*erda y aburridas por eso tenéis que meteros en la de los demás. OLVIDAROS DE MÍ Y DE NIEVES. Si os aburrís poneros a hacer ganchillo o os vais a ch*parla por ahí a alguno, pero dejáis mi vida en PAZ. -dicho esto se sentó otra vez en la silla- AH y una cosa más -se giró para mirarles a la cara- ¿Alvarochu? ¿En serio? Por favor exprimiros lo que tenéis sobre los hombros, que no sólo sirve para maquillarla y para peinarla, no, sirve para PENSAR, sí, PENSAR, y no, no es un pókemon.
La gente de clase iba entrando pero ella se fijó en dos que iban más serios de lo normal, Carlos y Nieves, se sorprendió que fueran juntos a clase, sobre todo por la conversación que habían tenido el día anterior sobre David y Blas.
Cap.165
-¿Qué?- dijeron las dos chicas a la vez en distintas partes de la ciudad.
Sabían perfectamente lo que les habían preguntado pero lo hicieron para darse tiempo a pensar. Entonces a ambas se les pasó de todo por la cabeza.
-Contesta, ¿No?- dijo Álvaro mirando a Laura.
-Pues... ¿Qué va a haber? Es obvio.- Contestó la chica.
-Yo no lo veo "tan obvio".
-Pues mira, lo siento.- dijo irónica.
-¿Estáis otra vez juntos?
-¿Qué? ¡No! Nosotros lo dejamos hace apenas unos días, no es que haya tenido mucho tiempo... Además, aunque hubiera tenido, por respeto...
-Ya claro.
-Uy.
Mientras tanto Nieves estaba callada, jugueteando nerviosa con su pulsera. ¿Qué le decía a Carlos? Entre ella y David no había nada, solo eran amigos. Amigos que se gustaban, eso lo sabía, tonta no era.
-Amigos, si ya lo sabes.- contestó al fin.
-Es que... Bueno, déjalo.
-No, ahora lo dices.
-Es una tontería.
-Hay tantas tonterías...
-¿Lo dices por mí?
-¿Te has dado por aludido?
Carlos se calló. Había perdido. Llegaron al patio de Nieves, era el momento de despedirse. Se pararon uno en frente de otro.
-Hasta mañana- dijo ella.
-Adiós, mañana nos vamos juntos o...
-No sé.
-Bueno, yo me voy a mi casa- dijo Laura sacando las llaves.- Un placer discutir contigo.
-Es lo único que hacemos.
-Ya me he dado cuenta.
-Adiós gruñona- Álvaro sonrió pero Laura entró en el patio.
Sabían perfectamente lo que les habían preguntado pero lo hicieron para darse tiempo a pensar. Entonces a ambas se les pasó de todo por la cabeza.
-Contesta, ¿No?- dijo Álvaro mirando a Laura.
-Pues... ¿Qué va a haber? Es obvio.- Contestó la chica.
-Yo no lo veo "tan obvio".
-Pues mira, lo siento.- dijo irónica.
-¿Estáis otra vez juntos?
-¿Qué? ¡No! Nosotros lo dejamos hace apenas unos días, no es que haya tenido mucho tiempo... Además, aunque hubiera tenido, por respeto...
-Ya claro.
-Uy.
Mientras tanto Nieves estaba callada, jugueteando nerviosa con su pulsera. ¿Qué le decía a Carlos? Entre ella y David no había nada, solo eran amigos. Amigos que se gustaban, eso lo sabía, tonta no era.
-Amigos, si ya lo sabes.- contestó al fin.
-Es que... Bueno, déjalo.
-No, ahora lo dices.
-Es una tontería.
-Hay tantas tonterías...
-¿Lo dices por mí?
-¿Te has dado por aludido?
Carlos se calló. Había perdido. Llegaron al patio de Nieves, era el momento de despedirse. Se pararon uno en frente de otro.
-Hasta mañana- dijo ella.
-Adiós, mañana nos vamos juntos o...
-No sé.
-Bueno, yo me voy a mi casa- dijo Laura sacando las llaves.- Un placer discutir contigo.
-Es lo único que hacemos.
-Ya me he dado cuenta.
-Adiós gruñona- Álvaro sonrió pero Laura entró en el patio.
Cap.164
Los cuatro "amigos" salieron del hospital, caminaron hasta la parada del autobús.
-Mierda -dijo Laura mirando su bolso.
-¿Qué pasa? -le preguntó su amiga.
-Me he dejado el monedero en la habitación y no tengo el bonobús.
-Yo te lo pago -ofreció Álvaro.
-No, no hace falta -contestó Laura sin mirarle.
-¿Cómo vas a subir sin bonobús? -preguntó Carlos.
-Nieves me lo paga -dijo Laura mirando a Nieves sonriente.
-Bueeeeno vale -contestó Nieves.
El viaje en autobús se hizo eterno, Laura y Nieves se sentaron y los otros dos chicos se quedaron de pie. Ninguno de los cuatro hablaba, la verdad es que tenían miedo a hablar y acabar discutiendo. El viaje acabó, los chicas se despidieron con un abrazo.
Carlos y Nieves empezaron a caminar. No sabían que decir.
-¿Estás enfadado conmigo? -preguntó finalmente Nieves.
-No, ¿por qué me preguntas eso?
Por otro camino, iban caminando Álvaro y Laura ni se miraban ni nada.
-No sé que decir -dijo Álvaro.
-Pues entonces no digas nada -le contestó Laura.
-Es que soy como Nieves no aguanto el silencio.
Nieves no contestó a la pregunta de Carlos. Así que cambiaron de tema. Lo que ellos no sabían es que los dos chicos hicieron la misma pregunta.
-¿Qué hay entre David y tú? -preguntó Carlos.
-¿Qué hay entre Blas y tú? -preguntó Álvaro.
-Mierda -dijo Laura mirando su bolso.
-¿Qué pasa? -le preguntó su amiga.
-Me he dejado el monedero en la habitación y no tengo el bonobús.
-Yo te lo pago -ofreció Álvaro.
-No, no hace falta -contestó Laura sin mirarle.
-¿Cómo vas a subir sin bonobús? -preguntó Carlos.
-Nieves me lo paga -dijo Laura mirando a Nieves sonriente.
-Bueeeeno vale -contestó Nieves.
El viaje en autobús se hizo eterno, Laura y Nieves se sentaron y los otros dos chicos se quedaron de pie. Ninguno de los cuatro hablaba, la verdad es que tenían miedo a hablar y acabar discutiendo. El viaje acabó, los chicas se despidieron con un abrazo.
Carlos y Nieves empezaron a caminar. No sabían que decir.
-¿Estás enfadado conmigo? -preguntó finalmente Nieves.
-No, ¿por qué me preguntas eso?
Por otro camino, iban caminando Álvaro y Laura ni se miraban ni nada.
-No sé que decir -dijo Álvaro.
-Pues entonces no digas nada -le contestó Laura.
-Es que soy como Nieves no aguanto el silencio.
Nieves no contestó a la pregunta de Carlos. Así que cambiaron de tema. Lo que ellos no sabían es que los dos chicos hicieron la misma pregunta.
-¿Qué hay entre David y tú? -preguntó Carlos.
-¿Qué hay entre Blas y tú? -preguntó Álvaro.
Cap.163
-¿Ahora qué han hecho?- Preguntó Dani llamando al ascensor.
Las chicas se lo contaron todo a su amigo, compraron los tickets de la televisión y se fueron camino a la habitación.
-Comprendo que os queráis quedar y más si de verdad os vuelven a gustar ahora, pero creo que lo mejor es que nos quedemos Ana y yo, porque al fin y al cabo también son nuestros amigos y así tampoco discutís más.
Nieves y Laura no dijeron nada. La verdad era que Dani tenía razón.
-Pero os podéis quedar mañana-propuso el chico llegando a la puerta de la habitación.
-Vale- dijeron las dos a la vez.
-¿Qué vale?- Preguntó Blas.
-Que como no dejes de preguntar te pondremos otro gotero- Dani sonrió.
Pusieron la televisión aunque lo cierto es que no hacían nada interesante un domingo por la tarde. Carlos tenía el mando e iba haciendo zapping, igual que Álvaro y Ana, estaba sentado en el sofá-cama, Dani estaba en una silla al lado de su novia. Laura y Nieves se sentaron cada una en la cama de uno de los dos chicos.
-Lo único que hacen es "Qué tiempo tan feliz"- dijo Carlos serio.
-Ni de coña, Telecinco no- se negó Ana.
Después de discutir un buen rato vieron un especial de Callejeros Viajeros. Nueva York. Cuando se quisieron dar cuenta era la ora de irse.
-Nosotras nos vamos- dijo Laura levantándose.
-Y nosotros- terminó Álvaro.
Iba a ser una vuelta muy tensa.
Las chicas se lo contaron todo a su amigo, compraron los tickets de la televisión y se fueron camino a la habitación.
-Comprendo que os queráis quedar y más si de verdad os vuelven a gustar ahora, pero creo que lo mejor es que nos quedemos Ana y yo, porque al fin y al cabo también son nuestros amigos y así tampoco discutís más.
Nieves y Laura no dijeron nada. La verdad era que Dani tenía razón.
-Pero os podéis quedar mañana-propuso el chico llegando a la puerta de la habitación.
-Vale- dijeron las dos a la vez.
-¿Qué vale?- Preguntó Blas.
-Que como no dejes de preguntar te pondremos otro gotero- Dani sonrió.
Pusieron la televisión aunque lo cierto es que no hacían nada interesante un domingo por la tarde. Carlos tenía el mando e iba haciendo zapping, igual que Álvaro y Ana, estaba sentado en el sofá-cama, Dani estaba en una silla al lado de su novia. Laura y Nieves se sentaron cada una en la cama de uno de los dos chicos.
-Lo único que hacen es "Qué tiempo tan feliz"- dijo Carlos serio.
-Ni de coña, Telecinco no- se negó Ana.
Después de discutir un buen rato vieron un especial de Callejeros Viajeros. Nueva York. Cuando se quisieron dar cuenta era la ora de irse.
-Nosotras nos vamos- dijo Laura levantándose.
-Y nosotros- terminó Álvaro.
Iba a ser una vuelta muy tensa.
domingo, 13 de mayo de 2012
Cap. 162
Todos los que estaban en la habitación se les quedaron mirando muy mal.
-¿Qué pasa? -preguntó Ana
-No os vais a quedar -dijo Laura.
-Nos quedamos nosotras -apoyó Nieves.
-Yo creo que es mejor que se queden ellos dos -dijo Álvaro con rintintín.
-Yo también -dijo Carlos así como quien no quiere la cosa.
La pareja se miró preguntándose que había pasado. Nadie decía nada.
-¿Y qué tal os va la vida? -intentó romper el silencio Dani.
-Nada -contestaron todos menos Ana.
Había mucha tensión en el ambiente.
-¿Vamos a estar así TODA la tarde? -preguntó Nieves
-Siempre que estamos en silencio, lo tienes que romper -le riñó Laura.
-Es que no aguanto el silencio -se excusó Nieves.
-Voy a comprar unos tickets para la tele -dijo Dani- Laura, Nieves acompañarme.
-¿Ahora? -preguntó Laura
-Qué pereza -dijo Nieves.
-O venís o os cojo a las dos de los pelos y no de los de la cabeza -dijo Dani amenazante, las dos chicas se levantaron corriendo y salieron de la habitación, Dani los siguió.
-¿Se puede saber qué ha pasado? -preguntó Dani mientras los tres empezaron a andar.
-Nada -dijo Laura.
-Es que son idiotas -contestó Nieves.
-NIEVES -dijo Laura.
-Nos lo va a acabar sacando -dijo Nieves.
-¿Quién? -preguntó Dani
-Álvaro y Carlos -contestó Laura enfadada
-¿Qué pasa? -preguntó Ana
-No os vais a quedar -dijo Laura.
-Nos quedamos nosotras -apoyó Nieves.
-Yo creo que es mejor que se queden ellos dos -dijo Álvaro con rintintín.
-Yo también -dijo Carlos así como quien no quiere la cosa.
La pareja se miró preguntándose que había pasado. Nadie decía nada.
-¿Y qué tal os va la vida? -intentó romper el silencio Dani.
-Nada -contestaron todos menos Ana.
Había mucha tensión en el ambiente.
-¿Vamos a estar así TODA la tarde? -preguntó Nieves
-Siempre que estamos en silencio, lo tienes que romper -le riñó Laura.
-Es que no aguanto el silencio -se excusó Nieves.
-Voy a comprar unos tickets para la tele -dijo Dani- Laura, Nieves acompañarme.
-¿Ahora? -preguntó Laura
-Qué pereza -dijo Nieves.
-O venís o os cojo a las dos de los pelos y no de los de la cabeza -dijo Dani amenazante, las dos chicas se levantaron corriendo y salieron de la habitación, Dani los siguió.
-¿Se puede saber qué ha pasado? -preguntó Dani mientras los tres empezaron a andar.
-Nada -dijo Laura.
-Es que son idiotas -contestó Nieves.
-NIEVES -dijo Laura.
-Nos lo va a acabar sacando -dijo Nieves.
-¿Quién? -preguntó Dani
-Álvaro y Carlos -contestó Laura enfadada
viernes, 11 de mayo de 2012
Cap.161
-Bueno, discutible- dijo Blas empezando a reírse pero al ver la mirada que le dirigió Álvaro se cayó.
-Bueno, chicos, cuando queráis os podéis ir- dijo Laura sentándose en la cama de Blas.
-¿Nos estás echando?- Preguntó Álvaro enfadado.
-No. Os decimos que nosotras ya estamos aquí.- Explico Nieves sonriendo.
-De eso nada. Mañana tenéis clase- Carlos se levantó y se puso bien el gorro.
-Y vosotros- Laura levantó los hombros.
-Pero no es lo mismo- dijo Álvaro enfadado.
-¿Por qué no?- Nieves había dejado la revista a un lado.
-Chicos...- David intentó hablar pero nadie le hizo caso.
Todos empezaron a discutir gritando sobre quien se quedaba y quien no, sin tampoco dar razones a lo que exigían. Entró una enfermera más bien vieja y bajita.
-Dejen de gritar- dijo enfadada. Todos se callaron.- Están en un hospital, si no mantienen un tono de voz respetable tendrán que irse. Ahora, me llevo el desayuno de los muchachos.
Cogió las bandejas y se fue. Todos se quedaron callados. Estaban enfadados. Laura y Nieves querían quedarse con sus amigos, la primera porque Blas siempre había sido su amigo y además hacía unas semanas eran novios. Nieves por otro lado quería cuidar de David, era su amigo, le tenía mucho cariño y siempre había estado a su lado, desde enseñarle matemáticas hasta dejarle darle algún que otro abrazo mientras veían la película de miedo en casa de Laura.
Álvaro odiaba el sentimiento de celos que le producía que Laura estuviera con Blas. Hacía poco que habían sido pareja y lo habían dejado como amigos, como muy amigos. Eso no podía ser normal. Además estaba todo lo de Edu ¿Otra vez volvía con eso? No lo podía evitar. Carlos cada vez se arrepentía más de haberle dicho a Nieves que no eran novios. Si le hubiera dicho que sí y que lo sentía mucho, le hubiera dado un beso, un abrazo. Todo esto no estaría pasando. Le gustaba muchísimo pero a David también, ¿Y a ella?
Blas, desde su cama entendía entre poco y nada. Y estaba más cerca del nada. Siempre había estado rodeado de gente, pero nunca habían discutido por él de esa manera. Obviamente siendo egoísta prefería a Laura, era una de sus grandes amigas, además de muy guapa. Aunque Álvaro también era un amigo de toda la vida. David, en la otra mano, veía sólo en claro que no se había sacado a Nieves de la cabeza y le iba a costar. Pero si se quedaba con ella podía perder a Carlos como amigo. Aunque eso era más bien algo entre él y ella.
-Hola chicos, hoy nos quedamos nosotros.- Dani y Ana entraron sonrientes de la mano
-Bueno, chicos, cuando queráis os podéis ir- dijo Laura sentándose en la cama de Blas.
-¿Nos estás echando?- Preguntó Álvaro enfadado.
-No. Os decimos que nosotras ya estamos aquí.- Explico Nieves sonriendo.
-De eso nada. Mañana tenéis clase- Carlos se levantó y se puso bien el gorro.
-Y vosotros- Laura levantó los hombros.
-Pero no es lo mismo- dijo Álvaro enfadado.
-¿Por qué no?- Nieves había dejado la revista a un lado.
-Chicos...- David intentó hablar pero nadie le hizo caso.
Todos empezaron a discutir gritando sobre quien se quedaba y quien no, sin tampoco dar razones a lo que exigían. Entró una enfermera más bien vieja y bajita.
-Dejen de gritar- dijo enfadada. Todos se callaron.- Están en un hospital, si no mantienen un tono de voz respetable tendrán que irse. Ahora, me llevo el desayuno de los muchachos.
Cogió las bandejas y se fue. Todos se quedaron callados. Estaban enfadados. Laura y Nieves querían quedarse con sus amigos, la primera porque Blas siempre había sido su amigo y además hacía unas semanas eran novios. Nieves por otro lado quería cuidar de David, era su amigo, le tenía mucho cariño y siempre había estado a su lado, desde enseñarle matemáticas hasta dejarle darle algún que otro abrazo mientras veían la película de miedo en casa de Laura.
Álvaro odiaba el sentimiento de celos que le producía que Laura estuviera con Blas. Hacía poco que habían sido pareja y lo habían dejado como amigos, como muy amigos. Eso no podía ser normal. Además estaba todo lo de Edu ¿Otra vez volvía con eso? No lo podía evitar. Carlos cada vez se arrepentía más de haberle dicho a Nieves que no eran novios. Si le hubiera dicho que sí y que lo sentía mucho, le hubiera dado un beso, un abrazo. Todo esto no estaría pasando. Le gustaba muchísimo pero a David también, ¿Y a ella?
Blas, desde su cama entendía entre poco y nada. Y estaba más cerca del nada. Siempre había estado rodeado de gente, pero nunca habían discutido por él de esa manera. Obviamente siendo egoísta prefería a Laura, era una de sus grandes amigas, además de muy guapa. Aunque Álvaro también era un amigo de toda la vida. David, en la otra mano, veía sólo en claro que no se había sacado a Nieves de la cabeza y le iba a costar. Pero si se quedaba con ella podía perder a Carlos como amigo. Aunque eso era más bien algo entre él y ella.
-Hola chicos, hoy nos quedamos nosotros.- Dani y Ana entraron sonrientes de la mano
Cap.160
-Para comprarle una revista a David -contestó Nieves.
-Si no te ha pedido nada.
-Me da igual, se la quiero comprar yo porque me da a mi la gana -dijo Nieves- Además, no tengo por qué darte explicaciones, ¿no me dijiste que no eramos novios? entonces lo que yo haga con mi vida no te interesa.
Carlos miró como la chica se daba la vuelta y se fue, suspiró y se fue detrás de ella. Nieves estaba cansada de la relación que tenia con Carlos y lo que le dijo en el bar de que no eran novios le dolió bastante.
//
-¿Por qué no os quedáis vosotras a dormir? -preguntó Blas.
-Porque no -contestó Álvaro rápido- porque hoy nos toca quedarnos a nosotros.
No dijeron nada más. Álvaro y Blas se miraban, David ojeaba su revista y de vez en cuando comentaba algo con Nieves la cual estaba sentada en una silla al lado de la cama de David, Carlos miraba a David y Nieves y Laura pensaba en sus cosas, se preguntaba si le volvía gustar Blas sentía muchas cosas por él.
Al rato las chicas se fueron, ya que era un poco tarde.
-¿Qué os pasa? -preguntó David.
-A mí nada -contestó Carlos un poco seco.
-Somos amigos -contestó Blas- no sé porque os ponéis así.
-No me hagas hablar -dijo por lo bajo Álvaro, Blas le escuchó pero prefirió no contestarle.
Los chicos pasaron una noche un poco tensa, no hablaban mucho y de vez en cuando se echaban alguna que otra picada. Por la mañana, las enfermeras les dieron el desayuno, en ese momento llegaron las chicas.
-Buenos días -dijo Laura abriendo la puerta, entró.
-Buenos días -le contestaron todos menos Carlos que seguía tumbado en el sofá-cama.
-¿Qué tal habéis pasado la noche? -les preguntó Nieves a Blas y David.
-FATAL -contestó Carlos- Tío, Álvaro, ¿cómo puedes roncar tanto?
-Yo no ronco -se defendió Álvaro.
-Si no te ha pedido nada.
-Me da igual, se la quiero comprar yo porque me da a mi la gana -dijo Nieves- Además, no tengo por qué darte explicaciones, ¿no me dijiste que no eramos novios? entonces lo que yo haga con mi vida no te interesa.
Carlos miró como la chica se daba la vuelta y se fue, suspiró y se fue detrás de ella. Nieves estaba cansada de la relación que tenia con Carlos y lo que le dijo en el bar de que no eran novios le dolió bastante.
//
-¿Por qué no os quedáis vosotras a dormir? -preguntó Blas.
-Porque no -contestó Álvaro rápido- porque hoy nos toca quedarnos a nosotros.
No dijeron nada más. Álvaro y Blas se miraban, David ojeaba su revista y de vez en cuando comentaba algo con Nieves la cual estaba sentada en una silla al lado de la cama de David, Carlos miraba a David y Nieves y Laura pensaba en sus cosas, se preguntaba si le volvía gustar Blas sentía muchas cosas por él.
Al rato las chicas se fueron, ya que era un poco tarde.
-¿Qué os pasa? -preguntó David.
-A mí nada -contestó Carlos un poco seco.
-Somos amigos -contestó Blas- no sé porque os ponéis así.
-No me hagas hablar -dijo por lo bajo Álvaro, Blas le escuchó pero prefirió no contestarle.
Los chicos pasaron una noche un poco tensa, no hablaban mucho y de vez en cuando se echaban alguna que otra picada. Por la mañana, las enfermeras les dieron el desayuno, en ese momento llegaron las chicas.
-Buenos días -dijo Laura abriendo la puerta, entró.
-Buenos días -le contestaron todos menos Carlos que seguía tumbado en el sofá-cama.
-¿Qué tal habéis pasado la noche? -les preguntó Nieves a Blas y David.
-FATAL -contestó Carlos- Tío, Álvaro, ¿cómo puedes roncar tanto?
-Yo no ronco -se defendió Álvaro.
Cap.159
Nieves y Carlos bajaron a la cafetería aunque a Nieves no le hacia mucha gracia. Odiaba los hospitales, pero sobretodo las cafeterías, tantas caras largas, personas llorando... Eso no era para ella.
Se sentaron en una mesa y ella se pidió una napolitana de chocolate.
-Bueno, ¿Qué tal la mañana?- preguntó Carlos un poco serio.
-Muy bien, he podido dormir en el sofá y luego éstos se han despertado y han comido y nada...
-Ah, me alegro.
//En la habitación 456//
-La merienda- entró una enfermera con dos bandejas, una con café con leche y la otra con un cola-cao. Se fue cuando los repartió.
-¿Cola-cao? ¿En serio?- dijo Laura divertida mientras Blas se lo tomaba.
-¿Qué pasa? Es chocolate.
-Es de críos.
-Soy un crío- sonrió.
-Bueno, a ver. ¿No tenéis nada que contar? Qué habéis hecho o cosas por el estilo- cortó Álvaro intentando cambiar de tema.
-Pues no ha pasado gran cosa la verdad- dijo David dando un sorbo al café- que amargo... Bueno, no sé. Hemos estado hablando y eso porque pagar la televisión es demasiado dinero.
-Entonces compramos revistas o algo.- dijo Laura.- Así tenemos algo de qué hablar.
-Amm.. Ya.
-¿Hasta que hora os quedáis?- Preguntó Blas a su amigo.
-Hasta mañana al medio día.
-Nosotras vendremos por la tarde.
-Os echaremos de menos- dijo Blas un poco triste.
Entonces llegaron Carlos y Nieves. Ella llevaba un periódico y unas revistas.
-Lo que cuesta encontrar un kiosko abierto los domingos- dijo sentándose.- Ah David, tengo tu revista- se levantó y se la dio, sonrieron.
-¿Y vosotras cuándo os váis?- Preguntó Carlos
-Cuando queramos- dijo Nieves. No le apetecía hablar mucho con Carlos y menos depués de lo que había pasado.
//Unos minutos antes en la cafetería//
-Acompáñame al kiosko- dijo Nieves cuando pagó.
-¿Para qué?
Se sentaron en una mesa y ella se pidió una napolitana de chocolate.
-Bueno, ¿Qué tal la mañana?- preguntó Carlos un poco serio.
-Muy bien, he podido dormir en el sofá y luego éstos se han despertado y han comido y nada...
-Ah, me alegro.
//En la habitación 456//
-La merienda- entró una enfermera con dos bandejas, una con café con leche y la otra con un cola-cao. Se fue cuando los repartió.
-¿Cola-cao? ¿En serio?- dijo Laura divertida mientras Blas se lo tomaba.
-¿Qué pasa? Es chocolate.
-Es de críos.
-Soy un crío- sonrió.
-Bueno, a ver. ¿No tenéis nada que contar? Qué habéis hecho o cosas por el estilo- cortó Álvaro intentando cambiar de tema.
-Pues no ha pasado gran cosa la verdad- dijo David dando un sorbo al café- que amargo... Bueno, no sé. Hemos estado hablando y eso porque pagar la televisión es demasiado dinero.
-Entonces compramos revistas o algo.- dijo Laura.- Así tenemos algo de qué hablar.
-Amm.. Ya.
-¿Hasta que hora os quedáis?- Preguntó Blas a su amigo.
-Hasta mañana al medio día.
-Nosotras vendremos por la tarde.
-Os echaremos de menos- dijo Blas un poco triste.
Entonces llegaron Carlos y Nieves. Ella llevaba un periódico y unas revistas.
-Lo que cuesta encontrar un kiosko abierto los domingos- dijo sentándose.- Ah David, tengo tu revista- se levantó y se la dio, sonrieron.
-¿Y vosotras cuándo os váis?- Preguntó Carlos
-Cuando queramos- dijo Nieves. No le apetecía hablar mucho con Carlos y menos depués de lo que había pasado.
//Unos minutos antes en la cafetería//
-Acompáñame al kiosko- dijo Nieves cuando pagó.
-¿Para qué?
Cap.158
Álvaro y Carlos entraron en la habitación y observaron la escena: Nieves encima de la cama de David juntitos, demasiado juntitos y Laura encima de la cama de Blas el chico tenía una mano encima de la pierna de Laura.
-Hola -saludaron Carlos y Álvaro-
Los chicos y chicas se saludaron.
-Bueno, chicas, ya os podéis ir -dijo Carlos.
-Sí nosotros nos quedamos con ellos -le apoyó Álvaro.
Las dos chicas ya no se acordaban que aún llevaban la ropa de la noche anterior. Laura le dio un beso en la mejilla a Blas, al igual que Nieves pero ella a David y después dieron un abrazo al otro chico. En cuanto a Álvaro y Carlos solo se limitaron a decirles un "adiós".
-¿Qué pasa? -preguntó Carlos.
-Doloridos -contestó Blas.
Los dos chicos se sentaron en el sofá-cama.
-Pues no se te veía muy dolorido cuando estabas tocando a Laura -contestó Álvaro.
-¿A qué viene eso? -preguntó David.
-Viene a lo mismo que a lo que viene que tú estuvieras prácticamente tumbado encima de Nieves -contestó Carlos.
Blas y David se miraron, no sabía porque sus amigos se habían puesto así. No hablaron mucho más hasta que Nieves y Laura llegaron cambiadas de ropa.
-Holaaa -saludó Nieves abriendo la puerta. Les dio un abrazo a cada uno de los enfermitos. Lo mismo hizo Laura.
-¿Qué tal estáis? -preguntó Laura.
-Bien -contestó Blas con una sonrisa.
-Esperando a que nos traigan la merienda. -apuntó David.
-Ahora que dices merienda, que hambre tengo -dijo Nieves
-Pues ve abajo a la cafetería. -le contestó Laura.
-Pues sí, me voy a la cafetería -dijo Nieves- ¿Quieres algo, Laura?
-No, he picado algo en mi casa antes de venir.
-Espera, yo te acompaño -dijo Carlos.
-Hola -saludaron Carlos y Álvaro-
Los chicos y chicas se saludaron.
-Bueno, chicas, ya os podéis ir -dijo Carlos.
-Sí nosotros nos quedamos con ellos -le apoyó Álvaro.
Las dos chicas ya no se acordaban que aún llevaban la ropa de la noche anterior. Laura le dio un beso en la mejilla a Blas, al igual que Nieves pero ella a David y después dieron un abrazo al otro chico. En cuanto a Álvaro y Carlos solo se limitaron a decirles un "adiós".
-¿Qué pasa? -preguntó Carlos.
-Doloridos -contestó Blas.
Los dos chicos se sentaron en el sofá-cama.
-Pues no se te veía muy dolorido cuando estabas tocando a Laura -contestó Álvaro.
-¿A qué viene eso? -preguntó David.
-Viene a lo mismo que a lo que viene que tú estuvieras prácticamente tumbado encima de Nieves -contestó Carlos.
Blas y David se miraron, no sabía porque sus amigos se habían puesto así. No hablaron mucho más hasta que Nieves y Laura llegaron cambiadas de ropa.
-Holaaa -saludó Nieves abriendo la puerta. Les dio un abrazo a cada uno de los enfermitos. Lo mismo hizo Laura.
-¿Qué tal estáis? -preguntó Laura.
-Bien -contestó Blas con una sonrisa.
-Esperando a que nos traigan la merienda. -apuntó David.
-Ahora que dices merienda, que hambre tengo -dijo Nieves
-Pues ve abajo a la cafetería. -le contestó Laura.
-Pues sí, me voy a la cafetería -dijo Nieves- ¿Quieres algo, Laura?
-No, he picado algo en mi casa antes de venir.
-Espera, yo te acompaño -dijo Carlos.
jueves, 10 de mayo de 2012
Cap.157
Laura dio una especie de gemido mientras se desperezaba aún en el sofá-cama. Miró a Carlos y Nieves.
-Buenos días- dijo.
Se levantó. Corrieron la cortina de forma que los dos chicos estaban como más "juntos".
-Bueno, ya te puedes ir.- le dijo Nieves a Carlos.
-Está bien, volveré con Álvaro por la tarde para que podáis ir a casa a cambiaros de ropa y eso.
Y es que en ese momento ellas se acordaron de que llevaban la misma ropa del sábado. Se sentaron en el sofá donde había dormido Laura.
-¿Qué tal la noche?
-Uff, dormir en las sillas es genial- dijo irónica Nieves.
-Lo suponía.
Las enfermeras y médicos entraban y salían, cambiaban goteros, ponían inyecciones, pero en cambio no dijeron nada del estado de los chicos. Después de la hora de la comida más o menos, Nieves estaba durmiendo en el sofá. Necesitaba descansar un poco en un sitio blando. Pero le despertó un ruido. Abrió los ojos y vio a Laura sentada en la cama de Blas, hablando con él. Se levantó rápido.
-¡Blas!- Se alegró mucho de ver a su amigo despierto aunque no se pudiera mover mucho y casi no tuviera voz.
-Durante este día hemos echado de menos tu móvil, que nunca deja de recibir mensajes- dijo Laura.
-Y tu "Hola chicas, ¿A qué no sabéis que me compré ayer?"- añadió Nieves riendo.- Pijo.
Blas sonrió como pudo. Esas eran sus chicas, definitivamente. Pero otro ruido hizo que los amigos se giraran, aunque más Laura y Nieves, ya que podían moverse mejor.
-¡¡David!!- Gritó Nieves olvídando que estaba en un hospital. Fue corriendo a su cama.
-No es justo- dijo Blas con un hilo de voz- su saludo ha sido mejor que el mío.
-Tú tienes unas cosas, él tiene otras- dijo Laura sonriendo.
-¿Qué tiene él?-
-A ella- señaló a Nieves que le estaba dando un abrazo como podía.
-¿Y yo?
-A mí- sonrió y él le correspondió.
La enfermera llegó y les hizo las pruebas que debía. La puerta de la habitación se volvió a abrir minutos más tarde.
-Buenos días- dijo.
Se levantó. Corrieron la cortina de forma que los dos chicos estaban como más "juntos".
-Bueno, ya te puedes ir.- le dijo Nieves a Carlos.
-Está bien, volveré con Álvaro por la tarde para que podáis ir a casa a cambiaros de ropa y eso.
Y es que en ese momento ellas se acordaron de que llevaban la misma ropa del sábado. Se sentaron en el sofá donde había dormido Laura.
-¿Qué tal la noche?
-Uff, dormir en las sillas es genial- dijo irónica Nieves.
-Lo suponía.
Las enfermeras y médicos entraban y salían, cambiaban goteros, ponían inyecciones, pero en cambio no dijeron nada del estado de los chicos. Después de la hora de la comida más o menos, Nieves estaba durmiendo en el sofá. Necesitaba descansar un poco en un sitio blando. Pero le despertó un ruido. Abrió los ojos y vio a Laura sentada en la cama de Blas, hablando con él. Se levantó rápido.
-¡Blas!- Se alegró mucho de ver a su amigo despierto aunque no se pudiera mover mucho y casi no tuviera voz.
-Durante este día hemos echado de menos tu móvil, que nunca deja de recibir mensajes- dijo Laura.
-Y tu "Hola chicas, ¿A qué no sabéis que me compré ayer?"- añadió Nieves riendo.- Pijo.
Blas sonrió como pudo. Esas eran sus chicas, definitivamente. Pero otro ruido hizo que los amigos se giraran, aunque más Laura y Nieves, ya que podían moverse mejor.
-¡¡David!!- Gritó Nieves olvídando que estaba en un hospital. Fue corriendo a su cama.
-No es justo- dijo Blas con un hilo de voz- su saludo ha sido mejor que el mío.
-Tú tienes unas cosas, él tiene otras- dijo Laura sonriendo.
-¿Qué tiene él?-
-A ella- señaló a Nieves que le estaba dando un abrazo como podía.
-¿Y yo?
-A mí- sonrió y él le correspondió.
La enfermera llegó y les hizo las pruebas que debía. La puerta de la habitación se volvió a abrir minutos más tarde.
Cap. 156
-Yo me quedo con él -dijo Laura- iros a casa.
-No, yo me quedo -dijo Nieves.
-Que no, YO me quedo -dijo Laura.
-Pues yo no me voy a ir.
-Yo tampoco -dijeron Carlos y Álvaro a la vez.
La médica dijo que tres de ellos se tenían que ir. Nieves se levantó y se fue, al igual que Carlos y Álvaro, pero ella se sentó en una silla.
-¿Te vas a quedar aquí toda la noche? -preguntó Carlos.
-Sí, hasta que no vea que David está bien, no me voy -les dijo Nieves.
-Yo me voy, estoy muy cansado -dijo Álvaro y se fue.
Carlos se sentó en la silla de al lado de Nieves.
-¿Qué haces? -le preguntó Nieves
-Me voy a quedar contigo
-No hace falta
-Me da igual, no te voy a dejar aquí sola.
No hablaron mucho más, los dos enseguida se quedaron dormidos. Carlos fue el primero en despertarse, estaba sentado en la silla con la cabeza apoyada en la pared, Nieves se quedó dormida en el hombro de Carlos, al verla el chico sonrío.
-Nieves, despierta -dijo Carlos meneando el hombro. La chica despertó.
-¿Estará ya David en la habitación? -preguntó Nieves.
-No sé
Ella se levantó y llamó a la puerta, al ver que nadie le respondía abrió la puerta. Vio a Laura durmiendo en uno de los sofá-cama que había en la habitación, Blas dormía en la cama y vio también a David, al ver a David se puso contenta, demasiado contenta. Laura empezó a menearse.
-No, yo me quedo -dijo Nieves.
-Que no, YO me quedo -dijo Laura.
-Pues yo no me voy a ir.
-Yo tampoco -dijeron Carlos y Álvaro a la vez.
La médica dijo que tres de ellos se tenían que ir. Nieves se levantó y se fue, al igual que Carlos y Álvaro, pero ella se sentó en una silla.
-¿Te vas a quedar aquí toda la noche? -preguntó Carlos.
-Sí, hasta que no vea que David está bien, no me voy -les dijo Nieves.
-Yo me voy, estoy muy cansado -dijo Álvaro y se fue.
Carlos se sentó en la silla de al lado de Nieves.
-¿Qué haces? -le preguntó Nieves
-Me voy a quedar contigo
-No hace falta
-Me da igual, no te voy a dejar aquí sola.
No hablaron mucho más, los dos enseguida se quedaron dormidos. Carlos fue el primero en despertarse, estaba sentado en la silla con la cabeza apoyada en la pared, Nieves se quedó dormida en el hombro de Carlos, al verla el chico sonrío.
-Nieves, despierta -dijo Carlos meneando el hombro. La chica despertó.
-¿Estará ya David en la habitación? -preguntó Nieves.
-No sé
Ella se levantó y llamó a la puerta, al ver que nadie le respondía abrió la puerta. Vio a Laura durmiendo en uno de los sofá-cama que había en la habitación, Blas dormía en la cama y vio también a David, al ver a David se puso contenta, demasiado contenta. Laura empezó a menearse.
Cap.155
-Están en el hospital- dijo Álvaro al fin.
-¿QUÉ?
-Lo que oyes, he llamado a la Laura pero no me coge el móvil yo voy para allá, es en La Fe. Llama a Nieves a ver si te lo coge o algo.
-Vale.
Colgaron y Álvaro se fue al hospital. Carlos llamó a Nieves pero tampoco tuvo respuesta. Se fe también en taxi al hospital. Álvaro llegó y preguntó por sus amigos en la recepción.
-Lo siento- dijo la enfermera- pero al señor La Fuente no puede verle porque no se le permite la entrada a intensivos a no ser de que sea un familiar.
-¿Y a Blas si, no?- dijo Álvaro casi desesperado.
-El señor Cantó está en la habitación 456, tercer piso a la izquierda.
-Gracias.
Álvaro subió corriendo. Entró en el ascensor al mismo tiempo que Carlos entraba y preguntaba lo mismo que Álvaro segundos antes. Cuando el último salió del ascensor se encontró con Dani y Ana. La chica llevaba los ojos rojos y abrazó a Álvaro cuando lo vio.
-¿Cómo está?- dijo Álvaro. Dani en seguida captó lo que quería decir.
-Está.
Se despidieron. Cuando llegó a la puerta vio los nombres al lado de la puerta: Blas Cantó, 14. David La fuente, 15. Recordó que faltaba solo una semana para el cumpleaños de Blas. Abrió la puerta y vio un espacio vacío y una cortina, siguió y vio a Blas en una cama blanca, con goteros, moratones y heridas. Y a sus dos amigas en el sofá a su lado.
Iba a hablar pero entonces llegó Carlos.
-Lo que me ha costado....- susurró entrando. Entonces vio la escena. Se le encogió el corazón.
-¿Cómo habéis llegado?- Preguntó Álvaro a las chicas.
-Estábamos cerca cuando pasó- dijo Laura antes de volver a empezar a llorar.
-Sí, íbamos hablando cuando oímos un ruido horroroso, fuimos a ver que había pasado y...- Nieves no pudo terminar de hablar. Empezó a llorar ella también.
-Nosotras les dimos vuestros números a los médicos- dijo finalmente Laura- no sabíamos qué hacer.
-Habéis hecho bien- dijo Carlos intentando sonreír.
.Vino uno de los médicos y les informó que a primera hora de la mañana subirían a David a la habitación. Ahora había que hablar quién se quedaría con Blas.
-¿QUÉ?
-Lo que oyes, he llamado a la Laura pero no me coge el móvil yo voy para allá, es en La Fe. Llama a Nieves a ver si te lo coge o algo.
-Vale.
Colgaron y Álvaro se fue al hospital. Carlos llamó a Nieves pero tampoco tuvo respuesta. Se fe también en taxi al hospital. Álvaro llegó y preguntó por sus amigos en la recepción.
-Lo siento- dijo la enfermera- pero al señor La Fuente no puede verle porque no se le permite la entrada a intensivos a no ser de que sea un familiar.
-¿Y a Blas si, no?- dijo Álvaro casi desesperado.
-El señor Cantó está en la habitación 456, tercer piso a la izquierda.
-Gracias.
Álvaro subió corriendo. Entró en el ascensor al mismo tiempo que Carlos entraba y preguntaba lo mismo que Álvaro segundos antes. Cuando el último salió del ascensor se encontró con Dani y Ana. La chica llevaba los ojos rojos y abrazó a Álvaro cuando lo vio.
-¿Cómo está?- dijo Álvaro. Dani en seguida captó lo que quería decir.
-Está.
Se despidieron. Cuando llegó a la puerta vio los nombres al lado de la puerta: Blas Cantó, 14. David La fuente, 15. Recordó que faltaba solo una semana para el cumpleaños de Blas. Abrió la puerta y vio un espacio vacío y una cortina, siguió y vio a Blas en una cama blanca, con goteros, moratones y heridas. Y a sus dos amigas en el sofá a su lado.
Iba a hablar pero entonces llegó Carlos.
-Lo que me ha costado....- susurró entrando. Entonces vio la escena. Se le encogió el corazón.
-¿Cómo habéis llegado?- Preguntó Álvaro a las chicas.
-Estábamos cerca cuando pasó- dijo Laura antes de volver a empezar a llorar.
-Sí, íbamos hablando cuando oímos un ruido horroroso, fuimos a ver que había pasado y...- Nieves no pudo terminar de hablar. Empezó a llorar ella también.
-Nosotras les dimos vuestros números a los médicos- dijo finalmente Laura- no sabíamos qué hacer.
-Habéis hecho bien- dijo Carlos intentando sonreír.
.Vino uno de los médicos y les informó que a primera hora de la mañana subirían a David a la habitación. Ahora había que hablar quién se quedaría con Blas.
Cap. 154
-No entiendo por que se ponen así -dijo Carlos.
En ese momento salieron Blas y David del bar.
-Nos vamos chavales -se despidió Blas
-Ya nos vemos -dijo David
Los cuatro amigos se despidieron y Blas y David se despidieron. Al momento salieron Laura y Nieves, siguieron su camino como si no hubieran visto a nadie. Los dos chicos se les quedaron mirando, no sabían si ir detrás de ellas o no. Se quedaron un rato más hablando y después se fueron cada uno a casa.
Sobre las 4 de la mañana Álvaro recibió una llamada poco usual.
-¿Dígame? -contestó Álvaro.
-Sí, hola -dijo una voz de una chica- le llamamos del hospital general "La Fe" de Valencia
-Sí, ¿qué pasa?
-Hace un rato han llegado dos chicos, amigos suyos, Blas Cantó y David Lafuente.
-¿QUÉ HA PASADO? -dijo Álvaro muy nervioso.
-Sus amigos han sido atropellados por un coche que se ha dado a la fuga.
Álvaro se quedó petrificado no sabía que hacer ni que decir, acababa de llegar de su casa y recibe esa llamada.
-Pero ¿están bien? -preguntó Álvaro por fin
-David es el que está más grave que es al que le ha dado el coche directamente, está en intensivos. Blas solo tiene dolores, un traumatismo en la cabeza y un hombro que a lo mejor hay que operar.
-Vale
-Le pedimos por favor -continuó la chica hablando- que venga a ver a sus amigos.
-Por supuesto ahora mismo voy -dijo Álvaro nervioso, colgó.
No sabía que hacer así que llamó a Laura, pero ella no le contestaba. Así que, decidió llamar a Carlos.
-¿Qué pasa? -saludó Carlos.
-Blas.... y.. David -empezó a hablar el chico, estaba muy nervioso y no sabía que decir.
-Tranquilízate, Blas y David ¿qué? -preguntó Carlos
Cap.153
-Siento que tu ex novia haya sido tan fea- Laura siguió caminando.
-No te he llamado fea.
//Con Carlos y Nieves//
-Déjame, de verdad- insitía ella ya cansada.
-¿Estás enfadada?
-No- dijo irónica. Entró de nuevo en el local.
Se sentó junto a Blas y David. Y empezó a hablar enfadada. Entró Laura también molesta y se sentó con ellos.
-HOLA- dijo enfadada.
-¿Qué tal?- dijo Blas sonriendo.
Las chicas le miraron fatal.
-No os rayéis por esas cosas- dijo David dando vueltas al mojito con su pajita.
-¿Vosotros también nos acusáis?- dijo Laura
-¿De qué?- Blas no entendía nada.
-Sois todos iguales, todo muy bonito hasta que una chica más guarra os dice lo contrario- Nieves se cruzó de brazos.
-Eh eh eh- David se echó hacia delante y le cogió de la mano. Se miraron.- Nadie os está llevando la contraria.
-Más que nada porque no sabemos a qué os tendríamos que llevar la contraria- dijo Blas. Después de la mirada de Laura se corrigió- Es decir, a que NO os tendríamos que llevar la contraria- sonrió.
-No os lo toméis a mal, chicas, pero nos tenemos que ir- dijo David pagando la cuenta, señaló las bebidas de las chicas- os invitamos.
-Eso, iros, iros- dijo Nieves suspirando.
-Ya nos daréis las gracias- dijo Blas
-¿Por?
-Vosotras sabréis- guiñó el ojo.- Hasta luego, preciosas- Le apretó un poco el hombro a Laura.
David le acarició la espalda a una Nieves enfadada y salieron por la puerta. Les quedaba un largo camino.
Mientras tanto, Álvaro y Carlos estaban en el banco que antes ocupaban Laura y Nieves.
-No lo entiendo- dijo Álvaro.
-Sólo queríamos informarnos...
//Unos minutos antes//
Esas dos chicas entraron corriendo y mojadas en el bar y cogieron a Carlos y Álvaro por el brazo.
-Vuestras amigas nos han empapado- dijo una haciendo como que lloraba.- y además nos han insultado.
-Y nos han amenazado con llamar a Edu y Borja- La otra hizo como que se secaba una lágrima que nunca existió.
Los chicos se miraron. Era imposible, lo sabían. Mejor lo hablaban con las chicas, quizás ellas tenían razón y el asunto de la fiesta había ido a demasiado.
-No te he llamado fea.
//Con Carlos y Nieves//
-Déjame, de verdad- insitía ella ya cansada.
-¿Estás enfadada?
-No- dijo irónica. Entró de nuevo en el local.
Se sentó junto a Blas y David. Y empezó a hablar enfadada. Entró Laura también molesta y se sentó con ellos.
-HOLA- dijo enfadada.
-¿Qué tal?- dijo Blas sonriendo.
Las chicas le miraron fatal.
-No os rayéis por esas cosas- dijo David dando vueltas al mojito con su pajita.
-¿Vosotros también nos acusáis?- dijo Laura
-¿De qué?- Blas no entendía nada.
-Sois todos iguales, todo muy bonito hasta que una chica más guarra os dice lo contrario- Nieves se cruzó de brazos.
-Eh eh eh- David se echó hacia delante y le cogió de la mano. Se miraron.- Nadie os está llevando la contraria.
-Más que nada porque no sabemos a qué os tendríamos que llevar la contraria- dijo Blas. Después de la mirada de Laura se corrigió- Es decir, a que NO os tendríamos que llevar la contraria- sonrió.
-No os lo toméis a mal, chicas, pero nos tenemos que ir- dijo David pagando la cuenta, señaló las bebidas de las chicas- os invitamos.
-Eso, iros, iros- dijo Nieves suspirando.
-Ya nos daréis las gracias- dijo Blas
-¿Por?
-Vosotras sabréis- guiñó el ojo.- Hasta luego, preciosas- Le apretó un poco el hombro a Laura.
David le acarició la espalda a una Nieves enfadada y salieron por la puerta. Les quedaba un largo camino.
Mientras tanto, Álvaro y Carlos estaban en el banco que antes ocupaban Laura y Nieves.
-No lo entiendo- dijo Álvaro.
-Sólo queríamos informarnos...
//Unos minutos antes//
Esas dos chicas entraron corriendo y mojadas en el bar y cogieron a Carlos y Álvaro por el brazo.
-Vuestras amigas nos han empapado- dijo una haciendo como que lloraba.- y además nos han insultado.
-Y nos han amenazado con llamar a Edu y Borja- La otra hizo como que se secaba una lágrima que nunca existió.
Los chicos se miraron. Era imposible, lo sabían. Mejor lo hablaban con las chicas, quizás ellas tenían razón y el asunto de la fiesta había ido a demasiado.
Cap. 152
Las dos chicas se metieron otra vez al bar, Laura y Nieves se sentaron en su sitio, se quedaron en silencio las dos hasta que alguien lo rompió.
-¿Qué pasa? -preguntó Álvaro.
-¿Qué pasa de qué? -preguntó Laura.
-Es que nos han dicho dos chicas que estaban aquí Borja y Edu.. -explicó Carlos hasta que Nieves le interrumpió.
-¿Borja y Edu? -preguntó indignada- Otra vez estáis con lo mismo.
-De verdad, en serio ¿no os cansáis? -preguntó Laura.
-Pero.. pero -intentó hablar Álvaro.
-Pero nada -le interrumpió Nieves- estáis todo el rato ligando con esas chicas y ahora nos sacáis el temita de nuevo.
-Será mejor que nos vayamos -dijo Laura.
-Sí, mejor -contestó Nieves. Las dos chicas empezaron a andar cada una hacia un lado, Álvaro persiguió a Laura y Carlos a Nieves.
-Nieves, espera -decía Carlos pero Nieves seguía caminando- ¿Se puede saber por qué te pones así? -Nieves se giró.
-¿Por qué? ¿por qué? -preguntó Nieves- Porque no te das cuenta de nada, solo te limitas a bailar con las guarras esas.
-¿Por qué te pones celosa? -preguntó Carlos.
-¿Yo? ¿Celosa?
-Sí, no estamos saliendo no sé porque te pones así -Eso a Nieves le dolió, o sea que después de los sms con te quiero, después de los besos que se han dado no estaban saliendo.
//Por el otro lado//
Laura caminaba sin mirar atrás, no quería saber nada de Álvaro.
-Espera un momento por favor -le suplicaba el chico.
-Déjame, vete con las guarras -le contestó Laura- que seguro que son más listas y más guapas que yo.
-¿Por qué dices eso? -preguntó Álvaro.
-Porque sí, porque acabáis el concierto y ni siquiera os dignáis a saludarnos ni a nada, solo estáis con las guarras de los escotes bailando.
-Sí, bueno pero son nuestras fans -dijo Álvaro- además están muy buenas -Álvaro se dio cuenta de lo que había dicho, Laura se acercó a él e hizo algo que se sorprendieron ambos.
-¿Qué pasa? -preguntó Álvaro.
-¿Qué pasa de qué? -preguntó Laura.
-Es que nos han dicho dos chicas que estaban aquí Borja y Edu.. -explicó Carlos hasta que Nieves le interrumpió.
-¿Borja y Edu? -preguntó indignada- Otra vez estáis con lo mismo.
-De verdad, en serio ¿no os cansáis? -preguntó Laura.
-Pero.. pero -intentó hablar Álvaro.
-Pero nada -le interrumpió Nieves- estáis todo el rato ligando con esas chicas y ahora nos sacáis el temita de nuevo.
-Será mejor que nos vayamos -dijo Laura.
-Sí, mejor -contestó Nieves. Las dos chicas empezaron a andar cada una hacia un lado, Álvaro persiguió a Laura y Carlos a Nieves.
-Nieves, espera -decía Carlos pero Nieves seguía caminando- ¿Se puede saber por qué te pones así? -Nieves se giró.
-¿Por qué? ¿por qué? -preguntó Nieves- Porque no te das cuenta de nada, solo te limitas a bailar con las guarras esas.
-¿Por qué te pones celosa? -preguntó Carlos.
-¿Yo? ¿Celosa?
-Sí, no estamos saliendo no sé porque te pones así -Eso a Nieves le dolió, o sea que después de los sms con te quiero, después de los besos que se han dado no estaban saliendo.
//Por el otro lado//
Laura caminaba sin mirar atrás, no quería saber nada de Álvaro.
-Espera un momento por favor -le suplicaba el chico.
-Déjame, vete con las guarras -le contestó Laura- que seguro que son más listas y más guapas que yo.
-¿Por qué dices eso? -preguntó Álvaro.
-Porque sí, porque acabáis el concierto y ni siquiera os dignáis a saludarnos ni a nada, solo estáis con las guarras de los escotes bailando.
-Sí, bueno pero son nuestras fans -dijo Álvaro- además están muy buenas -Álvaro se dio cuenta de lo que había dicho, Laura se acercó a él e hizo algo que se sorprendieron ambos.
Cap.151
Cuando salieron del escenario fueron automáticamente rodeados por chicas, cada una con más escote y menos bragas. Aunque la verdad, no les importaba mucho. Eran sus fans al fin y al cabo y el concierto había ido muy bien gracias a ellas. Aunque también era verdad que preferían un concierto con menos "David, ¡Guapo!" y más con un "otra, otra, otra..." Blas consiguió salir como pudo del círculo y se fue a la mesa de un rincón dónde estaban sus amigas.
-Hola chicas- se sentó el también- ¿Os ha gustado?
-Mucho- dijo seca Nieves.
-¿Qué pasa?
-Bueno, no sé. Nos esperábamos que al menos viniérais todos a saludar o algo, no sólo tú, que no es por nada, ¿Eh?- dijo Laura.
-En fin, ya sabéis lo que pasa- dijo subiendo los hombros- tampoco lo tenéis que paga conmigo de todas formas, que yo al menos sí he venido.
Nieves y Laura se quedaron hablando un poco con Blas y cuando él se fue a saludar a más gente ellas cogieron sus bebidas y se fueron a la calle a tomar un poco de aire.
Ya era de noche, hacía fresco, pero no les importaba. Ahí dentro no se podía casi respirar. Octubre. Por fin. Se sentaron en un banco que había al lado. Salieron unas chicas con un escote enorme y unas minifaldas que se les veían el inicio de las nalgas.
-Ya ves, están buenísimos- dijo una riendo.
-Tengo que conseguir que me lleven a casa y allí...- miró a su amiga pícara y las dos rieron.
Entonces vieron a Laura y Nieves, las cuales mucho caso, por no hacerles, no les hacían. Estaban hablando más bien de sus cosas. Las dos "fans" empezaron a hablar de ellas dos más alto. Las amigas se giraron.
-¿Habláis de nosotras?- dijo Nieves molesta. Estaba harta de que en el colegio se les conociera por el incidente de la fiesta.
-Sí, ¿Os habéis dado por aludidas con lo de guarras?- dijo una de ellas.
Las chicas se levantaron.
-Dejarnos en paz, buscaros vuestra propia vida- Laura no quería hablar del tema.
-Pero si es lo que hacéis- dijo la otra chica- os tiráis a Auryn, luego a Borja y Edu, volvéis con Auryn... Malas put*s...
Nieves y Laura ni lo pensaron dos veces. Cogieron el ron cola que estaban bebiendo y les tiraron uno a cada una. Ellas las miraron indignadas.
-Os vais a enterar- amenazó una de ellas.
-Hola chicas- se sentó el también- ¿Os ha gustado?
-Mucho- dijo seca Nieves.
-¿Qué pasa?
-Bueno, no sé. Nos esperábamos que al menos viniérais todos a saludar o algo, no sólo tú, que no es por nada, ¿Eh?- dijo Laura.
-En fin, ya sabéis lo que pasa- dijo subiendo los hombros- tampoco lo tenéis que paga conmigo de todas formas, que yo al menos sí he venido.
Nieves y Laura se quedaron hablando un poco con Blas y cuando él se fue a saludar a más gente ellas cogieron sus bebidas y se fueron a la calle a tomar un poco de aire.
Ya era de noche, hacía fresco, pero no les importaba. Ahí dentro no se podía casi respirar. Octubre. Por fin. Se sentaron en un banco que había al lado. Salieron unas chicas con un escote enorme y unas minifaldas que se les veían el inicio de las nalgas.
-Ya ves, están buenísimos- dijo una riendo.
-Tengo que conseguir que me lleven a casa y allí...- miró a su amiga pícara y las dos rieron.
Entonces vieron a Laura y Nieves, las cuales mucho caso, por no hacerles, no les hacían. Estaban hablando más bien de sus cosas. Las dos "fans" empezaron a hablar de ellas dos más alto. Las amigas se giraron.
-¿Habláis de nosotras?- dijo Nieves molesta. Estaba harta de que en el colegio se les conociera por el incidente de la fiesta.
-Sí, ¿Os habéis dado por aludidas con lo de guarras?- dijo una de ellas.
Las chicas se levantaron.
-Dejarnos en paz, buscaros vuestra propia vida- Laura no quería hablar del tema.
-Pero si es lo que hacéis- dijo la otra chica- os tiráis a Auryn, luego a Borja y Edu, volvéis con Auryn... Malas put*s...
Nieves y Laura ni lo pensaron dos veces. Cogieron el ron cola que estaban bebiendo y les tiraron uno a cada una. Ellas las miraron indignadas.
-Os vais a enterar- amenazó una de ellas.
miércoles, 9 de mayo de 2012
Cap. 150
Por la mañana quedaron en casa de Carlos para ensayar. Estuvieron cantando toda la mañana.
Las chicas se fueron de compras, la verdad es que se compraron muchas cosas: zapatos, pantalones, camisetas, vestidos.... Comieron juntas en el McDonald's, luego a las 4 o por ahí cada una se fue a su casa a cambiarse.
Laura se puso una mini-falda negra con brillantitos, con una camiseta a juego. Ana se puso un vestido rojo. Nieves se puso unos mini shorts vaqueros con una camiseta con el hombro caído.
Las tres llegaron al café-concierto y preguntaron por los chicos, los seguratas les dejaron pasar después de comprobar que los chicos las conocían.
Los 5 chicos se quedaron mirando a las chicas, estaban ESPECTACULARES.
-¿Qué? -preguntó finalmente Laura.
-Estáis muy guapas -dijo Blas sonriendo.
-Gracias -dijeron las tres chicas a la vez.
Todos se saludaron, Dani y Ana se sentaron en un sofá los dos juntitos, y los otros 6 se sentaron por donde podían.
-¿Nerviosos? -preguntó Nieves sonriendo.
-La verdad es que un poco -contestó David.
-Venga pero si no es para tanto -dijo Laura.
-Como se nota que tú no tienes que salir -le dijo Álvaro.
Siguieron hablando los 6, se reían pero los chicos seguían nerviosos.
Cuando salieron al escenario todas las chicas se pusieron como locas, aunque habían dos que no se lo estaban pasando muy bien. Álvaro buscó con la mirada a Laura y le guiñó un ojo, todas las chicas se pusieron como locas pensando que se lo habían echo a ella. Casi al final de la actuación Carlos buscó con la mirada a Nieves pero no la encontró.
Las chicas se fueron de compras, la verdad es que se compraron muchas cosas: zapatos, pantalones, camisetas, vestidos.... Comieron juntas en el McDonald's, luego a las 4 o por ahí cada una se fue a su casa a cambiarse.
Laura se puso una mini-falda negra con brillantitos, con una camiseta a juego. Ana se puso un vestido rojo. Nieves se puso unos mini shorts vaqueros con una camiseta con el hombro caído.
Las tres llegaron al café-concierto y preguntaron por los chicos, los seguratas les dejaron pasar después de comprobar que los chicos las conocían.
Los 5 chicos se quedaron mirando a las chicas, estaban ESPECTACULARES.
-¿Qué? -preguntó finalmente Laura.
-Estáis muy guapas -dijo Blas sonriendo.
-Gracias -dijeron las tres chicas a la vez.
Todos se saludaron, Dani y Ana se sentaron en un sofá los dos juntitos, y los otros 6 se sentaron por donde podían.
-¿Nerviosos? -preguntó Nieves sonriendo.
-La verdad es que un poco -contestó David.
-Venga pero si no es para tanto -dijo Laura.
-Como se nota que tú no tienes que salir -le dijo Álvaro.
Siguieron hablando los 6, se reían pero los chicos seguían nerviosos.
Cuando salieron al escenario todas las chicas se pusieron como locas, aunque habían dos que no se lo estaban pasando muy bien. Álvaro buscó con la mirada a Laura y le guiñó un ojo, todas las chicas se pusieron como locas pensando que se lo habían echo a ella. Casi al final de la actuación Carlos buscó con la mirada a Nieves pero no la encontró.
Cap.149
-Parejitaaaaa- Dijo Blas cogiendo a los dos por los hombros y llevándolos con los demás.- Tenemos que hablar lo de mañana.
-Ah sí- dijo Carlos.
Estuvieron hablando sobre lo que iban a hacer. Así mismo las chicas estuvieron pensando lo que iban a hacer ese mismo día, ya que ellos tenían que ir a ensayar.
Las clases pasaron lentas y aburridas. A la una en punto llegó Merche y les dijo que tenían que trabajar. ¡Por fin el último día!
-Está bien- dijo la directora- Hoy los que ayudáis al conserje vais a ordenar todos los bastidores del teatro y cosas de esas. Los que ayudáis a las mujeres de la limpieza, vais a fregar el suelo del teatro.
-¿Todo?- Preguntó Laura.
-Pues claro, no querrás hacer sólo un trozo- Respondió la directora.
La directora les dejó solos, Edu y su amigo se fueron al igual que Borja y el otro amigo ¡Era viernes! Los demás se quedaron a limpiar y ordenar.
-Yo el piso de arriba- se ofreció Blas subiendo el cubo y el mocho por las escaleras.
-Pues yo el pasillo izquierdo- dijo Laura poniendose los guantes blancos.
-Sí.- Dijo Álvaro un poco distraído.
Mientras, encima del escenario estaban Carlos y Nieves colocando todas las sillas a un lado que habían dejado los de la orquesta y poniendo bien las cortinas y demás. David estaba arriba con Blas dejando todo el equipo de sonido en condiciones.
-Mañana vendrás a vernos, ¿No?- Le dijo Carlos a Nieves.
-Claro- sonrió.
No pasó mucho más. Blas y David se fueron antes como siempre, porque ya estaba lo suyo hecho. Laura y Álvaro se fueron por un lado y Nieves y Carlos por el otro.
Los dos primeros iban hablando de lo que iban a hacer el fin de semana.
-¿Entonces habéis quedado para ir de compras? Que raro- dijo irónico Álvaro.
-Pues nos lo pasaremos bien, jum.
-Mañana os tenéis que poner lo que os compréis.
-No te puedo prometer que lo hagan.
-Pues tú al menos.
Mientras Nieves y Carlos estaban en un parque que encontraron por el camino. No habían casi personas, estaban en un banco limpio con sol y sombra, y Nieves tenía a su lado a Carlos. Poco más podía pedir.
Al día siguiente los chicos se levantaron nerviosos.
-Ah sí- dijo Carlos.
Estuvieron hablando sobre lo que iban a hacer. Así mismo las chicas estuvieron pensando lo que iban a hacer ese mismo día, ya que ellos tenían que ir a ensayar.
Las clases pasaron lentas y aburridas. A la una en punto llegó Merche y les dijo que tenían que trabajar. ¡Por fin el último día!
-Está bien- dijo la directora- Hoy los que ayudáis al conserje vais a ordenar todos los bastidores del teatro y cosas de esas. Los que ayudáis a las mujeres de la limpieza, vais a fregar el suelo del teatro.
-¿Todo?- Preguntó Laura.
-Pues claro, no querrás hacer sólo un trozo- Respondió la directora.
La directora les dejó solos, Edu y su amigo se fueron al igual que Borja y el otro amigo ¡Era viernes! Los demás se quedaron a limpiar y ordenar.
-Yo el piso de arriba- se ofreció Blas subiendo el cubo y el mocho por las escaleras.
-Pues yo el pasillo izquierdo- dijo Laura poniendose los guantes blancos.
-Sí.- Dijo Álvaro un poco distraído.
Mientras, encima del escenario estaban Carlos y Nieves colocando todas las sillas a un lado que habían dejado los de la orquesta y poniendo bien las cortinas y demás. David estaba arriba con Blas dejando todo el equipo de sonido en condiciones.
-Mañana vendrás a vernos, ¿No?- Le dijo Carlos a Nieves.
-Claro- sonrió.
No pasó mucho más. Blas y David se fueron antes como siempre, porque ya estaba lo suyo hecho. Laura y Álvaro se fueron por un lado y Nieves y Carlos por el otro.
Los dos primeros iban hablando de lo que iban a hacer el fin de semana.
-¿Entonces habéis quedado para ir de compras? Que raro- dijo irónico Álvaro.
-Pues nos lo pasaremos bien, jum.
-Mañana os tenéis que poner lo que os compréis.
-No te puedo prometer que lo hagan.
-Pues tú al menos.
Mientras Nieves y Carlos estaban en un parque que encontraron por el camino. No habían casi personas, estaban en un banco limpio con sol y sombra, y Nieves tenía a su lado a Carlos. Poco más podía pedir.
Al día siguiente los chicos se levantaron nerviosos.
Cap. 148
Álvaro no podía dejar de darle vueltas a lo que hubiera pasado si se hubieran besado. La verdad es que en ese momento tenía muchas ganas y eso significaba que había perdonado a Laura, pero eso no sabía si quería que pasará porque no se fiaba aún del todo de ella.
A la mañana siguiente, Carlos se levantó, se preparó, desayunó y se fue a buscar a Nieves corriendo. La verdad es que tenía ganas de verla. Nieves bajó lo más rápido que pudo.
-Hola -sonrío Nieves y abrazó a Carlos.
-Buenos días -se separaron y se besaron. Empezaron a caminar, sus manos rozaban y Carlos le cogió de la mano.
En otro lugar, Laura había bajado para irse a clase con Álvaro. Se saludaron con un abrazo. Los dos empezaron a caminar.
-¿Qué te dijo tu madre? -le preguntó Álvaro.
-Mejor no preguntes -dijo Laura.
-¿Tan malo fue?
-No, solo me dijo que no lo volviera a hacer y bueno me echó la bronca
Los dos llegaron a clase y se encontraron con Blas, David, Dani y Ana.
-¿Qué pasa? -saludó Álvaro.
-Huola -dijo Laura.
Los demás saludaron
-Tenemos que hablar de lo del concierto, saber que canciones vamos a cantar y que vamos a hacer -informó Blas.
-Chicas fuera -dijo Laura.
-No, no hace falta -dijo Dani
-Pero falta Carlos -apuntó David.
-Es que el sombreros tiene otra cosa en la cabeza -dijo Álvaro riéndose.
En ese momento entraron Carlos y Nieves por la puerta de la clase.
A la mañana siguiente, Carlos se levantó, se preparó, desayunó y se fue a buscar a Nieves corriendo. La verdad es que tenía ganas de verla. Nieves bajó lo más rápido que pudo.
-Hola -sonrío Nieves y abrazó a Carlos.
-Buenos días -se separaron y se besaron. Empezaron a caminar, sus manos rozaban y Carlos le cogió de la mano.
En otro lugar, Laura había bajado para irse a clase con Álvaro. Se saludaron con un abrazo. Los dos empezaron a caminar.
-¿Qué te dijo tu madre? -le preguntó Álvaro.
-Mejor no preguntes -dijo Laura.
-¿Tan malo fue?
-No, solo me dijo que no lo volviera a hacer y bueno me echó la bronca
Los dos llegaron a clase y se encontraron con Blas, David, Dani y Ana.
-¿Qué pasa? -saludó Álvaro.
-Huola -dijo Laura.
Los demás saludaron
-Tenemos que hablar de lo del concierto, saber que canciones vamos a cantar y que vamos a hacer -informó Blas.
-Chicas fuera -dijo Laura.
-No, no hace falta -dijo Dani
-Pero falta Carlos -apuntó David.
-Es que el sombreros tiene otra cosa en la cabeza -dijo Álvaro riéndose.
En ese momento entraron Carlos y Nieves por la puerta de la clase.
Cap.147
Terminaron y se fueron a casa. Por uno de los caminos Nieves y Carlos iban muy contentos. No querían decirles aún nada a los demás, preferían esperar un poco.
-¿Sabes que te he echado mucho de menos?
-¿Cuánto?-dijo Nieves sonriendo.
Carlos se limitó a pararse y cogerle la cara suavemente. Volvieron a besarse.
Por el otro camino, la pareja de amigos iba bastante más callada y cortada. ¿Qué iba a pasar en el gimnasio? ¿Y si Carlos no les hubiera interrumpido? Laura prefería no darle muchas vueltas.
-Ya verás la cara de mi madre cuando me vea- dijo Laura sonriendo. Aún llevaba el pelo y la camiseta mojada.
-Bueno, le dices que te has duchado.
-No se lo creerá pero bueno.
-Pues diles la verdad.
-Vale, me veo la escena: "mamá, voy chopada por que Álvaro me ha mojado con el teléfono de la ducha".
-No, mejor invéntate algo.
-¿Verdad?
Carlos y Nieves estaban en el patio de ella. No querían irse cada uno a su casa. Se habían echado demasiado de menos y les había costado lo suyo volver juntos. Sobretodo por la confianza.
-Me pregunto que nos pasará mañana- dijo Nieves- Parece que en todos los castigos nos pasa algo.
-La verdad es que sí, pero el castigo de hoy ha sido muy bueno.
Volvieron a besarse.
Laura y Álvaro ya habían llegado a casa de ella.
-Bueno, princesa, le dejo en su castillo- dijo Álvaro.
-Sí, tengo que enfrentarme a la bruja de la ropa mojada.
-Hasta mañana, princesa- Álvaro le dio un abrazo como los que se había acostumbrado a dar ahora y que a Laura le gustaban tanto.
Nieves subió a casa. Bonito castigo, sí señor. Se acostó pero antes de que pudiera dormirse le llegó un SMS de Carlos "Pasa buena noche, soñaré contigo e.e Te Quiero <3" Sonrió. Bonito castigo se quedaba corto.
En cambio en otra cama alguien no podía dormir porque estaba pensado también en esa misma tarde, aunque no había tenido la misma suerte de Nieves y Carlos.
-¿Sabes que te he echado mucho de menos?
-¿Cuánto?-dijo Nieves sonriendo.
Carlos se limitó a pararse y cogerle la cara suavemente. Volvieron a besarse.
Por el otro camino, la pareja de amigos iba bastante más callada y cortada. ¿Qué iba a pasar en el gimnasio? ¿Y si Carlos no les hubiera interrumpido? Laura prefería no darle muchas vueltas.
-Ya verás la cara de mi madre cuando me vea- dijo Laura sonriendo. Aún llevaba el pelo y la camiseta mojada.
-Bueno, le dices que te has duchado.
-No se lo creerá pero bueno.
-Pues diles la verdad.
-Vale, me veo la escena: "mamá, voy chopada por que Álvaro me ha mojado con el teléfono de la ducha".
-No, mejor invéntate algo.
-¿Verdad?
Carlos y Nieves estaban en el patio de ella. No querían irse cada uno a su casa. Se habían echado demasiado de menos y les había costado lo suyo volver juntos. Sobretodo por la confianza.
-Me pregunto que nos pasará mañana- dijo Nieves- Parece que en todos los castigos nos pasa algo.
-La verdad es que sí, pero el castigo de hoy ha sido muy bueno.
Volvieron a besarse.
Laura y Álvaro ya habían llegado a casa de ella.
-Bueno, princesa, le dejo en su castillo- dijo Álvaro.
-Sí, tengo que enfrentarme a la bruja de la ropa mojada.
-Hasta mañana, princesa- Álvaro le dio un abrazo como los que se había acostumbrado a dar ahora y que a Laura le gustaban tanto.
Nieves subió a casa. Bonito castigo, sí señor. Se acostó pero antes de que pudiera dormirse le llegó un SMS de Carlos "Pasa buena noche, soñaré contigo e.e Te Quiero <3" Sonrió. Bonito castigo se quedaba corto.
En cambio en otra cama alguien no podía dormir porque estaba pensado también en esa misma tarde, aunque no había tenido la misma suerte de Nieves y Carlos.
Cap. 146
Carlos y Nieves se estaban besando, llevaban días queriéndolo los dos pero no encontraban el momento, la verdad, es que ese tampoco era un momento muy romántico pero algo tenían que hacer.
//Fuera de la habitación//
Álvaro perseguía a Laura son un cubo de agua, se reían mucho y se insultaban también.
-Ni se te ocurra acercarte a mi con ese cubo de agua -dijo Laura riéndose.
-Uy que no -le dijo Álvaro.
Se acercó poco a poco, pero Laura cada vez se echaba más para atrás.
-Vale, vale -dijo Álvaro dejando el cubo de agua en el suelo- Me acerco a ti sin cubo de agua.
-Sin cubo de agua, sí -le dijo Laura.
Álvaro dio unos pasos y alcanzó a Laura, la cogió de la cintura y se iba a acercándose poco a poco pero cuando estaban a punto de darse un beso escucharon algo.
-ABRIRNOS -gritaba Carlos pegando golpes a la puerta.
Laura y Álvaro miraron a la puerta y se acercaron.
-¿Carlos? -preguntó Álvaro.
-No, tu primo el cojo -dijo Carlos en tono sarcástico- Pues claro que soy yo.
-¿Y Nieves? -preguntó Laura.
-Aquí -contestó Nieves.
-Escucha, sombreros -empezó a explicar Álvaro- Tu tira y yo empujo ¿vale?
-Vale -contestó.
Los dos chico hicieron lo que habían quedado y la puerta se abrió.
-Por fin -dijo Nieves inspirando el aire.
-¿Qué os ha pasado? -preguntó Carlos cuando vio que Laura y Álvaro estaban chopados.
-Nada -contestaron los dos a la vez.
-¿Y vosotros dos que habéis hecho ahí a dentro? -preguntó Laura con una sonrisa.
-Nada -contestaron los dos a la vez.
Los 4 amigos se metieron el baño, Carlos y Nieves ayudaron a Álvaro y a Laura a acabar de limpiar el baño.
//Fuera de la habitación//
Álvaro perseguía a Laura son un cubo de agua, se reían mucho y se insultaban también.
-Ni se te ocurra acercarte a mi con ese cubo de agua -dijo Laura riéndose.
-Uy que no -le dijo Álvaro.
Se acercó poco a poco, pero Laura cada vez se echaba más para atrás.
-Vale, vale -dijo Álvaro dejando el cubo de agua en el suelo- Me acerco a ti sin cubo de agua.
-Sin cubo de agua, sí -le dijo Laura.
Álvaro dio unos pasos y alcanzó a Laura, la cogió de la cintura y se iba a acercándose poco a poco pero cuando estaban a punto de darse un beso escucharon algo.
-ABRIRNOS -gritaba Carlos pegando golpes a la puerta.
Laura y Álvaro miraron a la puerta y se acercaron.
-¿Carlos? -preguntó Álvaro.
-No, tu primo el cojo -dijo Carlos en tono sarcástico- Pues claro que soy yo.
-¿Y Nieves? -preguntó Laura.
-Aquí -contestó Nieves.
-Escucha, sombreros -empezó a explicar Álvaro- Tu tira y yo empujo ¿vale?
-Vale -contestó.
Los dos chico hicieron lo que habían quedado y la puerta se abrió.
-Por fin -dijo Nieves inspirando el aire.
-¿Qué os ha pasado? -preguntó Carlos cuando vio que Laura y Álvaro estaban chopados.
-Nada -contestaron los dos a la vez.
-¿Y vosotros dos que habéis hecho ahí a dentro? -preguntó Laura con una sonrisa.
-Nada -contestaron los dos a la vez.
Los 4 amigos se metieron el baño, Carlos y Nieves ayudaron a Álvaro y a Laura a acabar de limpiar el baño.
Cap.145
-Pobre bichito- dijo Álvaro
-Cállate, es asqueroso.
-Bueno, princesa, ya puede volver a limpiar la ducha. Tenga cuidado con los hongos.
-¿Qué?
//En el cuarto//
-¡¡DAVID!! ¡¡ÁLVARO!! ¡¡LAURA!! ¡¡BLAS!!- Gritaba Carlos pegando a la puerta.
-Como que no te oyen, ¿Eh?- dijo Nieves sentada en una colchoneta.
-Tienen que oirnos...
Pero lo que no sabían es que Borja, su amigo, Blas y David ya se habían ido. Y Álvaro y Laura estaban en las duchas del final en la otra parte del gimnasio. Iban a tener que esperar un rato.
//En las duchas//
-Que asco, por dios... Si lo llego a saber me cambio por David o algo el puesto- se quejaba Laura lavando los azulejos de la ducha.
-Es... Gracioso- dijo Álvaro entrando en la misma.
-Pues no le veo la parte divertida, chico.
Álvaro cogió el teléfono de la ducha.
-Siempre puedes hacer ésto.
Abrió el grifo y mojó a Laura.
//En el cuarto//
Carlos se había cansado de gritar. Se sentó junto con Nieves en la colchoneta.
-Bueno, podría ser peor.- dijo sonriendo- podías estar con Borja.
-La verdad es que sí- Nieves sonrió.
-¿Cuánto tiempo tardarán en encontrarnos?
-Yo pongo una hora o hora y media.
-Hay muchas cosas que se pueden hacer en hora, hora y media.- sonrió.
//En las duchas//
Álvaro no dejaba de reír.
-Te mato, TE MA.TO- dijo Laura empapada y enfadada. Cogió el cubo de agua y se lo tiró.
-Ala, al menos la que te he tirado estaba limpia.
El chico salió corriendo detrás de ella.
//En el cuarto de las colchonetas//
Nieves no se podía creer lo que estaba ocurriendo
-Cállate, es asqueroso.
-Bueno, princesa, ya puede volver a limpiar la ducha. Tenga cuidado con los hongos.
-¿Qué?
//En el cuarto//
-¡¡DAVID!! ¡¡ÁLVARO!! ¡¡LAURA!! ¡¡BLAS!!- Gritaba Carlos pegando a la puerta.
-Como que no te oyen, ¿Eh?- dijo Nieves sentada en una colchoneta.
-Tienen que oirnos...
Pero lo que no sabían es que Borja, su amigo, Blas y David ya se habían ido. Y Álvaro y Laura estaban en las duchas del final en la otra parte del gimnasio. Iban a tener que esperar un rato.
//En las duchas//
-Que asco, por dios... Si lo llego a saber me cambio por David o algo el puesto- se quejaba Laura lavando los azulejos de la ducha.
-Es... Gracioso- dijo Álvaro entrando en la misma.
-Pues no le veo la parte divertida, chico.
Álvaro cogió el teléfono de la ducha.
-Siempre puedes hacer ésto.
Abrió el grifo y mojó a Laura.
//En el cuarto//
Carlos se había cansado de gritar. Se sentó junto con Nieves en la colchoneta.
-Bueno, podría ser peor.- dijo sonriendo- podías estar con Borja.
-La verdad es que sí- Nieves sonrió.
-¿Cuánto tiempo tardarán en encontrarnos?
-Yo pongo una hora o hora y media.
-Hay muchas cosas que se pueden hacer en hora, hora y media.- sonrió.
//En las duchas//
Álvaro no dejaba de reír.
-Te mato, TE MA.TO- dijo Laura empapada y enfadada. Cogió el cubo de agua y se lo tiró.
-Ala, al menos la que te he tirado estaba limpia.
El chico salió corriendo detrás de ella.
//En el cuarto de las colchonetas//
Nieves no se podía creer lo que estaba ocurriendo
Cap. 144
//Con las colchonetas//
-Como pesan -dijo Nieves cogiendo una colchoneta y poniéndola en el montón.
-Serás blandengue -dijo Carlos riéndose.
Nieves le sacó la lengua.
//En los baños//
-Que asco -dijo Álvaro limpiando una ducha.
-AAAHHH -gritó Laura, salió corriendo de una de las duchas y se puso encima de un banco que había en el baño.
Álvaro salió del baño y miró a Laura.
-UNA CUCARACHA -gritó ella.
Álvaro entró en el baño.
-Venga pero si es una cucaracha muy pequeña -dijo Álvaro mirándola.
-Que asco -dijo Laura- MÁTALA -le ordenó.
-Mátala tú -le dijo Álvaro.
//Con Carlos y Nieves//
-Vale, ya está -dijo Nieves sentándose en el suelo.
-¿Ya estás cansada? -le preguntó Carlos riéndose.
-Pues sí.
-Bueno va, vamos fuera que tenemos que limpiar el gimnasio -Carlos se levantó y fue a abrir la puerta, pero no se abría.
-¿Qué pasa? -le dijo Nieves aún sentada en el suelo.
-No se abre la puerta.
-¿Qué? -le dijo Nieves levantándose.
Los dos empezaron a empujar pero la puerta no se abría.
-¿Qué hacemos? -preguntó Nieves.
-No lo sé
-Ves, está es la impotencia que sentimos el día de la fiesta.
//En el baño//
Álvaro por fin había matado a la cucaracha.
-Por fin -dijo Laura aliviada bajándose del banco.
-Como pesan -dijo Nieves cogiendo una colchoneta y poniéndola en el montón.
-Serás blandengue -dijo Carlos riéndose.
Nieves le sacó la lengua.
//En los baños//
-Que asco -dijo Álvaro limpiando una ducha.
-AAAHHH -gritó Laura, salió corriendo de una de las duchas y se puso encima de un banco que había en el baño.
Álvaro salió del baño y miró a Laura.
-UNA CUCARACHA -gritó ella.
Álvaro entró en el baño.
-Venga pero si es una cucaracha muy pequeña -dijo Álvaro mirándola.
-Que asco -dijo Laura- MÁTALA -le ordenó.
-Mátala tú -le dijo Álvaro.
//Con Carlos y Nieves//
-Vale, ya está -dijo Nieves sentándose en el suelo.
-¿Ya estás cansada? -le preguntó Carlos riéndose.
-Pues sí.
-Bueno va, vamos fuera que tenemos que limpiar el gimnasio -Carlos se levantó y fue a abrir la puerta, pero no se abría.
-¿Qué pasa? -le dijo Nieves aún sentada en el suelo.
-No se abre la puerta.
-¿Qué? -le dijo Nieves levantándose.
Los dos empezaron a empujar pero la puerta no se abría.
-¿Qué hacemos? -preguntó Nieves.
-No lo sé
-Ves, está es la impotencia que sentimos el día de la fiesta.
//En el baño//
Álvaro por fin había matado a la cucaracha.
-Por fin -dijo Laura aliviada bajándose del banco.
Cap.143
-¿Sí? ¿Y eso?
-Contactos de Blas- dijo Nieves imitando la voz de Carlos.
-Ah guay.
Al día siguiente Laura bajaba las escaleras, salió del patio.
-Huola- dijo como siempre.
Pero Álvaro en vez de contestarle le dio un abrazo. Laura se puso muy contenta de repente.
Mientras, Nieves iba bromeando con Carlos.
-En serio- dijo ella sonriendo.- ¿Te pegas el gorro o algo a la cabeza? Porque no hay forma de que te lo quites.
-Que va que va- respondió el chico riendo- Mira- se quitó el gorro, se arregló el pelo y se lo puso a Nieves.
Los cuatro amigos llegaron casi a la vez a clase. Prácticamente todos los alumnos ya estaban en clase, entonces los 5 chicos Auryn salieron a la pizarra.
-¡Hola!- dijo Blas sonriendo.- Queríamos deciros que Auryn dará su primer concierto el sábado en la sala durango.
Todos aplaudieron e hicieron algunas preguntas a los chicos, otras se dedicaron a pensar en como ligárselos.
El día pasó normal. los ocho amigos se quedaron a comer en la cafetería del colegio porque hacía tiempo que no lo hacían.
-¿Esta tarde también teneis que limpiar?- Preguntó Dani mordiendo la manzana.
-Y mañana- susurró Blas limpiándose la boca.
-Bueno, tú no hables, que en cuanto acabas tus cosas te vas corriendo- dijo Laura
-Pues como David- dijo Nieves señalando al amigo.
Por la tarde, a las cinco, se reunieron todos en el patio.
-Hoy trabajareis todos más o menos juntos- dijo Merche a los diez.- Los que ayudáis al conserje vais a ordenar todas las sillas de las gradas y los armarios de las colchonetas. Los que ayudáis a las señoras de la limpieza limpiaréis los vestuarios.
-Más tampones.- murmuró Álvaro enfadado.
Los chicos se fueron a su trabajo. Mientras Borja, David y su amigo ordenaban todas las sillas, Nieves y Carlos entraron en el cuarto de las colchonetas.
Mientras, como Edu y su amigo se habían ido como siempre, Blas, Álvaro y Laura estaban en los vestuarios.
-Yo voy al de chicos- dijo Blas- que es más pequeño y lo hago so sólo.
-Eso, eso huye- dijo Laura mientras Blas se fue
-Contactos de Blas- dijo Nieves imitando la voz de Carlos.
-Ah guay.
Al día siguiente Laura bajaba las escaleras, salió del patio.
-Huola- dijo como siempre.
Pero Álvaro en vez de contestarle le dio un abrazo. Laura se puso muy contenta de repente.
Mientras, Nieves iba bromeando con Carlos.
-En serio- dijo ella sonriendo.- ¿Te pegas el gorro o algo a la cabeza? Porque no hay forma de que te lo quites.
-Que va que va- respondió el chico riendo- Mira- se quitó el gorro, se arregló el pelo y se lo puso a Nieves.
Los cuatro amigos llegaron casi a la vez a clase. Prácticamente todos los alumnos ya estaban en clase, entonces los 5 chicos Auryn salieron a la pizarra.
-¡Hola!- dijo Blas sonriendo.- Queríamos deciros que Auryn dará su primer concierto el sábado en la sala durango.
Todos aplaudieron e hicieron algunas preguntas a los chicos, otras se dedicaron a pensar en como ligárselos.
El día pasó normal. los ocho amigos se quedaron a comer en la cafetería del colegio porque hacía tiempo que no lo hacían.
-¿Esta tarde también teneis que limpiar?- Preguntó Dani mordiendo la manzana.
-Y mañana- susurró Blas limpiándose la boca.
-Bueno, tú no hables, que en cuanto acabas tus cosas te vas corriendo- dijo Laura
-Pues como David- dijo Nieves señalando al amigo.
Por la tarde, a las cinco, se reunieron todos en el patio.
-Hoy trabajareis todos más o menos juntos- dijo Merche a los diez.- Los que ayudáis al conserje vais a ordenar todas las sillas de las gradas y los armarios de las colchonetas. Los que ayudáis a las señoras de la limpieza limpiaréis los vestuarios.
-Más tampones.- murmuró Álvaro enfadado.
Los chicos se fueron a su trabajo. Mientras Borja, David y su amigo ordenaban todas las sillas, Nieves y Carlos entraron en el cuarto de las colchonetas.
Mientras, como Edu y su amigo se habían ido como siempre, Blas, Álvaro y Laura estaban en los vestuarios.
-Yo voy al de chicos- dijo Blas- que es más pequeño y lo hago so sólo.
-Eso, eso huye- dijo Laura mientras Blas se fue
Cap. 142
-¡Hola, mamá preciosa! -dijo Nieves con una sonrisa mientras abrazaba a su madre.
-¿Y esa felicidad? -le preguntó.
-Nada, nada -dijo y se fue a su habitación.
//En otra finca//
Álvaro se acercó a Laura le abrazó. Se despidieron y Laura subió a su casa. Iba feliz, hacía siglos que Álvaro no le daba un abrazo. Se encerró en su cuarto. Le sonó el móvil.
-Hola, furcia -contestó Laura cariñosamente.
-Que BONITA es la vida -dijo Nieves.
-Uy ¿y esa felicidad?
Nieves se rió.
-Nada, nada
-Venga cuéntamelo.
-VALE -le contestó Nieves.
//Flasback de Nieves//
Carlos y Nieves acababan de llegar al patio de Nieves.
-Jope ya hemos llegado -se quejó Nieves.
-Sí, la verdad es que se me ha hecho corto el camino -contestó el chico.
-A mi también -Nieves sonrío.
Carlos se acercó a ella y le dio un beso en la mejilla, pero cerca de la boca. Nieves sonrió y le contestó dándole un abrazo
//Fin//
-Bueno pues no eres la única a la que le ha pasado algo bueno -dijo Laura con una sonrisa aunque Nieves no la pudiera ver.
-¿Qué te ha pasado a ti?
-Pues que Álvaro cuando hemos llegado a mi casa me ha dado un abrazo, pero no un abrazo normal, un abrazo largo que yo estaba deseando que llegará. Por fin lo he vuelto a tocar y él no se ha quejado. La verdad es que echaba bastante de menos a ese Álvaro.
-Al parecer ya han aceptado que lo que les dijimos era la verdad.
-Sí, eso espero y que no se vuelvan a meter en un lío por nuestra culpa.
-AH -gritó su amiga- ¿Sabes qué? Los chicos van a dar un concierto.
-¿Y esa felicidad? -le preguntó.
-Nada, nada -dijo y se fue a su habitación.
//En otra finca//
Álvaro se acercó a Laura le abrazó. Se despidieron y Laura subió a su casa. Iba feliz, hacía siglos que Álvaro no le daba un abrazo. Se encerró en su cuarto. Le sonó el móvil.
-Hola, furcia -contestó Laura cariñosamente.
-Que BONITA es la vida -dijo Nieves.
-Uy ¿y esa felicidad?
Nieves se rió.
-Nada, nada
-Venga cuéntamelo.
-VALE -le contestó Nieves.
//Flasback de Nieves//
Carlos y Nieves acababan de llegar al patio de Nieves.
-Jope ya hemos llegado -se quejó Nieves.
-Sí, la verdad es que se me ha hecho corto el camino -contestó el chico.
-A mi también -Nieves sonrío.
Carlos se acercó a ella y le dio un beso en la mejilla, pero cerca de la boca. Nieves sonrió y le contestó dándole un abrazo
//Fin//
-Bueno pues no eres la única a la que le ha pasado algo bueno -dijo Laura con una sonrisa aunque Nieves no la pudiera ver.
-¿Qué te ha pasado a ti?
-Pues que Álvaro cuando hemos llegado a mi casa me ha dado un abrazo, pero no un abrazo normal, un abrazo largo que yo estaba deseando que llegará. Por fin lo he vuelto a tocar y él no se ha quejado. La verdad es que echaba bastante de menos a ese Álvaro.
-Al parecer ya han aceptado que lo que les dijimos era la verdad.
-Sí, eso espero y que no se vuelvan a meter en un lío por nuestra culpa.
-AH -gritó su amiga- ¿Sabes qué? Los chicos van a dar un concierto.
Cap.141
-Si te ibas a quedar aquí podías haber estado por lo menos dentro, así aunque no limpiaras...- dijo Álvaro pasando enfadado por al lado de Edu, que estaba con Borja.
-¿Os vais sin decir nada?- dijo Edu haciendose la víctima.
-No hay nada que decir- dijo Álvaro siguiendo caminando.
En ese momento salieron también Nieves y Carlos riendo.
-Hombre, Nieves. ¿Nos vamos juntos?- dijo Borja congiendo a Nieves por los hombros.
-Eh, déjala- Carlos se puso a la defensiva.
-No vamos a volver a discutir.- dijo Laura
-Pues no- Nieves se deshizo del brazo de Borja- no quiero pasarme un mes entero subiendo mesas de un piso a otro.
-¿Subir mesas?- Preguntó Laura
-Sí.
-Nosotros limpiamos cristales y recogemos tampones del baño.
-Oh, que interesante.- dijo Nieves irónica a su amiga.
-Bueno, que si, que os vayais que tenemos hambre.- dijo Álvaro cogiendo a Laura del brazo.
-Ya les habeis perdonado que nos la chuparan?- dijo Edu sonriendo.
Álvaro y Carlos se callaron serios. Borja en cambio sonrió como su amigo.
-Ya está bien, ¿no?- dijo Nieves enfadada- sois unos malditos críos. Ahora muy chulos pero nunca solos.
-Sí, va uno y el otro detrás como el perrito faldero- apoyó Laura.
Los dos chicos se quedaron callados y se fueron. Entonces cada una se fue con el chico de siempre.
//Por el camino del norte//
-¿En serio? ¿Un concierto?- dijo Nieves asombrada.
-Sí, son los contactos de Blas, ya sabes.
-¡Qué fuerte! ¿Y dónde es?
//Por el camino del sur//
-¿De verdad hubieras sido capaz de meterme la escobilla en la boca?- decía Álvaro divertido.
-Pues claro- reía Laura- para que no dijeras tantas palabrotas.
-Eso es con jabón.
-Da igual. Jum
Llegaron al patio de la chica. Se quedaron esperando que hacer.
//En el camino norte//
Nieves entró ilusionada y feliz a casa.
-¿Os vais sin decir nada?- dijo Edu haciendose la víctima.
-No hay nada que decir- dijo Álvaro siguiendo caminando.
En ese momento salieron también Nieves y Carlos riendo.
-Hombre, Nieves. ¿Nos vamos juntos?- dijo Borja congiendo a Nieves por los hombros.
-Eh, déjala- Carlos se puso a la defensiva.
-No vamos a volver a discutir.- dijo Laura
-Pues no- Nieves se deshizo del brazo de Borja- no quiero pasarme un mes entero subiendo mesas de un piso a otro.
-¿Subir mesas?- Preguntó Laura
-Sí.
-Nosotros limpiamos cristales y recogemos tampones del baño.
-Oh, que interesante.- dijo Nieves irónica a su amiga.
-Bueno, que si, que os vayais que tenemos hambre.- dijo Álvaro cogiendo a Laura del brazo.
-Ya les habeis perdonado que nos la chuparan?- dijo Edu sonriendo.
Álvaro y Carlos se callaron serios. Borja en cambio sonrió como su amigo.
-Ya está bien, ¿no?- dijo Nieves enfadada- sois unos malditos críos. Ahora muy chulos pero nunca solos.
-Sí, va uno y el otro detrás como el perrito faldero- apoyó Laura.
Los dos chicos se quedaron callados y se fueron. Entonces cada una se fue con el chico de siempre.
//Por el camino del norte//
-¿En serio? ¿Un concierto?- dijo Nieves asombrada.
-Sí, son los contactos de Blas, ya sabes.
-¡Qué fuerte! ¿Y dónde es?
//Por el camino del sur//
-¿De verdad hubieras sido capaz de meterme la escobilla en la boca?- decía Álvaro divertido.
-Pues claro- reía Laura- para que no dijeras tantas palabrotas.
-Eso es con jabón.
-Da igual. Jum
Llegaron al patio de la chica. Se quedaron esperando que hacer.
//En el camino norte//
Nieves entró ilusionada y feliz a casa.
martes, 8 de mayo de 2012
Cap. 140
-Esa es tu parte -se quejó Laura.
-Pues entonces no te quejes de que están mal -le contestó Álvaro.
Los otros estaban subiendo mesas, hasta que Carlos se torció el tobillo y se sentó en el suelo.
-¿Estás bien? -preguntó Nieves preocupada
-Sí, estoy bien tranquila.
-Si ya lo decía yo eres un blandengue -dijo Borja mientras pasaba por delante de Nieves y de Carlos.
-Algún día le pegaré tal patada en la boca que seguro que deja de hablar, porque no tendrá dientes. Soy.. Borja... y no...tengo dientes jajajaja -imitó a Carlos a Borja sin dientes.
Nieves se reía muchísimo.
-Mira que eres tonto.
-Queréis dejaros de tonteo y seguir subiendo cosas -se quejó Borja.
-Mira se hace así -le dijo Laura con el trapo en la mano y limpió los cristales- Ves.
-A sus órdenes mi sargento -le dijo Álvaro en tono de burla.
-Venga, no te veo trabajar.
Álvaro cogió el trapo e hizo lo que Laura le había dicho. Laura se metió en los retretes del cuarto de baño, empezó a limpiarlos. Pero se quejaba mucho lo cual le hacía gracia a Álvaro.
-¿Te hace gracia? -dijo Laura saliendo con la escobilla del váter en la mano.
-No, que va -dijo Álvaro aguantándose la risa.
-Pues nada, vamos a reírnos todos -Laura se acercó a Álvaro y le amenazaba con meterle en la boca la escobilla del váter. Los dos empezaron a correr por el cuarto de baño, así que todo quedó peor de como estaba al principio.
Por fin habían acabado con las mesas, estaban sentados en el suelo, porque si decían que habían acabado les mandarían más trabajo y no querían. David y Nieves hablaban tan tranquilos pero entre Borja y Carlos seguía habiendo un cierta tensión.
A Laura y Álvaro les tocó volver a limpiar otra vez casi todo el baño porque se había puesto igual de sucio que al empezar. Los dos se pusieron manos a la obra.
Cuando acabaron se reunieron con los otros, David y Borja ya se habían ido o eso pensaban ellos, por lo menos por la parte de Borja.
Al salir del colegio por portería, se encontraron a alguien que no esperaban encontrarse, lo cual pintaba bastante mal.
Cap.139
No pudieron hacer ni informática ni EF porque los profesores no estaban. En el patio estaban hablando todos juntos, como antes, aunque aún quedaba algo de tensión algunas veces.
-Blas, amijo- dijo Álvaro- Hoy friegas tú el suelo.
La directora pasó y les dijo que los que se iban con las señoras de la limpieza tenían que limpiar las aulas de 1º y 2º de la ESO y los ayudantes del conserje tenían que ayudar a cambiar las mesas del aula de 3ºB.
-Nos tienen explotados- suspiró David
-Tú no hables porque ayer te fuiste- dijo Carlos.
-Porque terminé mi parte allí abajo y tenía que estudiar.
Las tres siguientes clases pasaron igual de aburridas. Cuando sonó el timbre a las dos los chicos tenían mucha hambre pero no podían irse. Estaban castigados.
Laura, Blas y Álvaro se fueron al piso de arriba, dónde la amable limpiadora les había dejado los guantes, mocho, cubo de agua, paños y limpia cristales.
Nieves se fue a 3ºB con David y Carlos, los pupitres estaban por ahí en medio tirados. Borja y su amigo entraron.
-Nos han dicho que tenemos que llevar los pupitres al aula del final y luego subirlos del almacén aquí.
-Madre mía- suspiró Nieves, iba a ser un trabajo largo.
En el piso de arriba, Edu y su amigo ni aparecieron por lo que los tres amigos tuvieron que hacerlo todo solos.
-Me parece increible que ni se acerquen- dijo Laura limpiando chuletas de matemáticas de las mesas.
-Ya verás si lo veo...-Murmuró Álvaro limpiando los cristales.
-No- interrumpió un Blas que fregaba mal el suelo.- No más peleas.
-Eso- Apoyó Laura.- Y Blas, hijo mío, aprende a fregar.
Nieves y Carlos iban llevando mesas al aula del final, hasta ahí todo era muy fácil. Los problemas empezaron cuando tuvieron que subir los pupitres nuevos.
-A ver, ¿Tú de cara y yo de espaldas?- dijo Carlos en los pies de la escalera.
-Sí, a ver si me voy a tropezar...
-¡Venga!- Se quejaba Borja- Hasta que vosotros no la subáis nosotros no podemos.
-¿Y David?- Se acordó Nieves.
-Se ha ido ya- dijo Carlos subiendo los hombros.
-Pues mañana nos vamos tu y yo.
-¡Que subáis la mesa!- Gritó Borja- Odio cuando me ignoran...
-Álvaro, por Dios, has dejado los cristales peor que antes- Se quejó Laura.
-Yo ya he terminado de fregar. Adios- Blas se fue corriendo.
-Bueno, pues hazlos tú, lista
Cap. 138
-Pues nada, que me dio un pequeño beso.
-¡OS BESASTEIS! -gritó Nieves, la clase se calló de repente.
-Shhh, cállate. No, nos besamos. Me dio un pequeño beso en la mejilla idiota
-Ah vale, ya decía yo.
-Te toca.
-Pues que ayer cuando lleguemos a mi patio, Carlos me abrazó muy fuerte. La verdad yo creo que tenía ganas pero no lo sé. Y esta mañana, en el camino
//Flashback//
-¿Qué pasa con la fiesta? -preguntó Nieves
-Es que le he estado dando vueltas a lo que nos dijisteis. Que todo fue un cumulo de infortunidades.
-Ajam. ¿Y qué pasa?
-Que creo.... que.. es que no sé si creerte. Quiero pero no sé.
-Si realmente quieres, puedes.
Carlos cogió aire.
-Puede ser que sí que te crea, pero no me pidas que todo vuelva a ser como antes. Esperate un poco.
A Nieves le salió una sonrisa enorme, no podía creer lo que acababa de escuchar.
//Fin//
-Estoy super feliz -continuó hablando Nieves.
-Me alegro mucho -dijo Laura sonriendo- a lo mejor no son tan malas personas, y nos llegan a perdonar
-Eso espero -dijo Nieves suspirando.
La profesora de Lengua entró a clase. La hora pasó lenta y eterna, eran las 8 de la mañana y la profesora no paraba de hablar, así que los alumnos estaban todos dormidos. Sonó la campana y todos los alumnos guardaron las cosas rápidamente.
-¡OS BESASTEIS! -gritó Nieves, la clase se calló de repente.
-Shhh, cállate. No, nos besamos. Me dio un pequeño beso en la mejilla idiota
-Ah vale, ya decía yo.
-Te toca.
-Pues que ayer cuando lleguemos a mi patio, Carlos me abrazó muy fuerte. La verdad yo creo que tenía ganas pero no lo sé. Y esta mañana, en el camino
//Flashback//
-¿Qué pasa con la fiesta? -preguntó Nieves
-Es que le he estado dando vueltas a lo que nos dijisteis. Que todo fue un cumulo de infortunidades.
-Ajam. ¿Y qué pasa?
-Que creo.... que.. es que no sé si creerte. Quiero pero no sé.
-Si realmente quieres, puedes.
Carlos cogió aire.
-Puede ser que sí que te crea, pero no me pidas que todo vuelva a ser como antes. Esperate un poco.
A Nieves le salió una sonrisa enorme, no podía creer lo que acababa de escuchar.
//Fin//
-Estoy super feliz -continuó hablando Nieves.
-Me alegro mucho -dijo Laura sonriendo- a lo mejor no son tan malas personas, y nos llegan a perdonar
-Eso espero -dijo Nieves suspirando.
La profesora de Lengua entró a clase. La hora pasó lenta y eterna, eran las 8 de la mañana y la profesora no paraba de hablar, así que los alumnos estaban todos dormidos. Sonó la campana y todos los alumnos guardaron las cosas rápidamente.
Cap.137
Fue un abrazo largo, intenso, con ganas, con cariño. Nieves había llegado a pensar que nunca más iba a tenerlo entre los brazos.
//Por otro camino//
Había demasiado silencio en la conversación, el camino se había hecho muy largo.
-No hace falta que me acompañes a casa.
-Puede que no fuer a hacerlo.
-Por si acaso.
-Me da igual. Lo voy a hacer. Es tarde.
Llegaron al patio de Laura y se quedaron mirándose, ¿Ahora qué?
//En una finca//
Nieves acababa de entrar en el ascensor, estaba feliz, radiante. Tenía ganas de contárselo a Laura. Pero sobretodo tenía ganas de ir a las 8 a clase para irse con él como había dicho.
Al día siguiente se vistió y se preparó y bajó corriendo cuando tocaron al timbre. Salió y se saludaron.
-¿Qué tal has dormido?
-Muy bien.- Respondió ella sonriendo.
-Me gustaría hablar contigo de lo de la fiesta.
A Nieves lo último le pilló de imprevisto.
//En otra parte de la ciudad//
Álvaro llamó al timbre. Laura bajó y saludó. Empezaron a andar. Hablaban sobre los deberes que no habían hecho y sobre quien tendría que fregar hoy el suelo.
-Pues ni para ti ni para mí, que lo haga Blas- dijo Laura.
-Me parece bien- Respondió Álvaro sonriendo.
Llegaron a clase, donde ya estaban los demás. Laura se fue instantáneamente con Nieves.
-Tengo que contarte algo muy fuerte de ayer- dijeron las dos a la vez.
Se rieron.
-Tú primero- dijo Nieves.
-Pues verás, ayer cuando Álvaro me acompañó a casa y nos quedamos en el patio sin saber que hacer y bueno... Ya sabes, cosas que pasan.
-¿Qué cosas?
-Pues cosas.
-Detalles.
//Por otro camino//
Había demasiado silencio en la conversación, el camino se había hecho muy largo.
-No hace falta que me acompañes a casa.
-Puede que no fuer a hacerlo.
-Por si acaso.
-Me da igual. Lo voy a hacer. Es tarde.
Llegaron al patio de Laura y se quedaron mirándose, ¿Ahora qué?
//En una finca//
Nieves acababa de entrar en el ascensor, estaba feliz, radiante. Tenía ganas de contárselo a Laura. Pero sobretodo tenía ganas de ir a las 8 a clase para irse con él como había dicho.
Al día siguiente se vistió y se preparó y bajó corriendo cuando tocaron al timbre. Salió y se saludaron.
-¿Qué tal has dormido?
-Muy bien.- Respondió ella sonriendo.
-Me gustaría hablar contigo de lo de la fiesta.
A Nieves lo último le pilló de imprevisto.
//En otra parte de la ciudad//
Álvaro llamó al timbre. Laura bajó y saludó. Empezaron a andar. Hablaban sobre los deberes que no habían hecho y sobre quien tendría que fregar hoy el suelo.
-Pues ni para ti ni para mí, que lo haga Blas- dijo Laura.
-Me parece bien- Respondió Álvaro sonriendo.
Llegaron a clase, donde ya estaban los demás. Laura se fue instantáneamente con Nieves.
-Tengo que contarte algo muy fuerte de ayer- dijeron las dos a la vez.
Se rieron.
-Tú primero- dijo Nieves.
-Pues verás, ayer cuando Álvaro me acompañó a casa y nos quedamos en el patio sin saber que hacer y bueno... Ya sabes, cosas que pasan.
-¿Qué cosas?
-Pues cosas.
-Detalles.
Cap. 136
-Que va -dijeron los 3 a la vez.
-Venga, Carlos, trauma -dijo Nieves.
-Pues mi trauma es que odio el pescado -explicó Carlos- cuando era pequeño fui a una tienda de animales y me quede mirando los peces naranjas que hay, pues lo miré y de repente se dio la vuelta y se subió hacia arriba.
Todos se rieron.
-No, es verdad. Es un trauma lo pasé mal. Pobre pez -reía Carlos.
-Vale, el mejor trauma es el tuyo -se reía Laura a carcajadas.
-Hablando de animales -dijo Nieves- ¿Habéis visto esas ratas blancas que venden? Que asco.
-Tampoco dan tanto asco -dijo Álvaro- exagerada.
-Que sí, que esas ratas las cogen de la calle y después las venden -explicó Nieves.
El resto de la cena se lo pasaron bastante bien, al final ha sido una buena idea eso de los castigarán.
-Bueno yo me tengo que ir, que ya es tarde -dijo Nieves mirando la hora de su BB.
-Sí yo también me voy, que mis padres me reclaman.
Todos se levantaron y se fueron cada uno por su lado. Álvaro y Laura por un camino y Carlos y Nieves se fueron por el suyo.
Álvaro aún iba riendo. La verdad es que se lo había pasado bastante bien.
-Ha estado bien, la cena express -dijo Álvaro.
-La verdad es que sí -le contestó Laura.
Se hizo el silencio,la verdad es que no sabían ninguno de los dos que decir.
-¿Qué tal vais con el grupo? -dijo Laura.
-Pues bien la verdad -contestó- la gente nos está recibiendo bien
-Me alegro -se miraron y sonrieron.
//Por otro camino//
Carlos y Nieves iban caminando bastante juntos, se lo estaban pasando genial.
-¿Me vas a dar la chaqueta? -preguntó Carlos en broma- Si quieres quedatela ya de paso
-Pues sí, jum, me la voy a quedar -dijo Nieves mientras se la abrochaba.
Cuando llegaron al patio de Nieves, Carlos hizo algo que sorprendió a Nieves
-Venga, Carlos, trauma -dijo Nieves.
-Pues mi trauma es que odio el pescado -explicó Carlos- cuando era pequeño fui a una tienda de animales y me quede mirando los peces naranjas que hay, pues lo miré y de repente se dio la vuelta y se subió hacia arriba.
Todos se rieron.
-No, es verdad. Es un trauma lo pasé mal. Pobre pez -reía Carlos.
-Vale, el mejor trauma es el tuyo -se reía Laura a carcajadas.
-Hablando de animales -dijo Nieves- ¿Habéis visto esas ratas blancas que venden? Que asco.
-Tampoco dan tanto asco -dijo Álvaro- exagerada.
-Que sí, que esas ratas las cogen de la calle y después las venden -explicó Nieves.
El resto de la cena se lo pasaron bastante bien, al final ha sido una buena idea eso de los castigarán.
-Bueno yo me tengo que ir, que ya es tarde -dijo Nieves mirando la hora de su BB.
-Sí yo también me voy, que mis padres me reclaman.
Todos se levantaron y se fueron cada uno por su lado. Álvaro y Laura por un camino y Carlos y Nieves se fueron por el suyo.
Álvaro aún iba riendo. La verdad es que se lo había pasado bastante bien.
-Ha estado bien, la cena express -dijo Álvaro.
-La verdad es que sí -le contestó Laura.
Se hizo el silencio,la verdad es que no sabían ninguno de los dos que decir.
-¿Qué tal vais con el grupo? -dijo Laura.
-Pues bien la verdad -contestó- la gente nos está recibiendo bien
-Me alegro -se miraron y sonrieron.
//Por otro camino//
Carlos y Nieves iban caminando bastante juntos, se lo estaban pasando genial.
-¿Me vas a dar la chaqueta? -preguntó Carlos en broma- Si quieres quedatela ya de paso
-Pues sí, jum, me la voy a quedar -dijo Nieves mientras se la abrochaba.
Cuando llegaron al patio de Nieves, Carlos hizo algo que sorprendió a Nieves
Cap.135
Entraron en el bar-restaurante y se sentaron en una mesa de 4. Nieves enfrente de Carlos y a su lado Laura frente a Álvaro. Pidieron la cena y mientras esperaban siguieron hablando y riéndose unos de otros.
-Va, Álvaro- Animó Carlos- ¿Tu trauma?
-No os riáis.
-Prometido- Dijo su amigo poniendo la mano en el pecho.
-En fin... El caso es que tengo ... cierto temor a los hamsters.
Todos empezaron a reírse.
-¿En serio?- Decía Laura riendo.
-Bueno, a todo lo que sea hamsters y derivados: ratas, cobayas...
-Yo tengo una cobaya- dijo Nieves riendo.
-¿Y eso? ¿Te mordió Hamtaro?- dijo Carlos
-Pues no. Resulta que con 9 o 10 años me regalaron un hamster. Y claro, en la fiesta de cumpleaños en mi casa estaban mis primos. Nos metimos en la cocina y lo lavamos.
-Pobre animalito- dijo Laura bebiendo agua.
-Espera- dijo Álvaro.- Que teníamos que secarlo, entonces no se nos ocurrió otra cosa que meterlo en el microondas.
-¡¿Qué?!- dijeron los tres a la vez.
-Eramos pequeños- se defendió.
-La madre que os parió- dijo Nieves.
-Laura, tu trauma- dijo corriendo Álvaro para cambiar de tema.
-Yo no tengo traumas.
-Pues tus miedos.
-Yo no le tengo miedo a nada.
-Mentira.- dijo Nieves.- Saca tus trapos sucios.
Les trajeron la cena y empezaron a cenar.
-Bueno, pues mi trauma es... La oscuridad con más gente.
-¿Cómo?- Dijo Carlos.
-Pues estar a oscuras con más gente.
-De normal es al revés.
-Es que de pequeña me dejaron a oscuras con mis primos y me daban sustos- Se quejó Laura- Vosotros haríais lo mismo.
-Va, Álvaro- Animó Carlos- ¿Tu trauma?
-No os riáis.
-Prometido- Dijo su amigo poniendo la mano en el pecho.
-En fin... El caso es que tengo ... cierto temor a los hamsters.
Todos empezaron a reírse.
-¿En serio?- Decía Laura riendo.
-Bueno, a todo lo que sea hamsters y derivados: ratas, cobayas...
-Yo tengo una cobaya- dijo Nieves riendo.
-¿Y eso? ¿Te mordió Hamtaro?- dijo Carlos
-Pues no. Resulta que con 9 o 10 años me regalaron un hamster. Y claro, en la fiesta de cumpleaños en mi casa estaban mis primos. Nos metimos en la cocina y lo lavamos.
-Pobre animalito- dijo Laura bebiendo agua.
-Espera- dijo Álvaro.- Que teníamos que secarlo, entonces no se nos ocurrió otra cosa que meterlo en el microondas.
-¡¿Qué?!- dijeron los tres a la vez.
-Eramos pequeños- se defendió.
-La madre que os parió- dijo Nieves.
-Laura, tu trauma- dijo corriendo Álvaro para cambiar de tema.
-Yo no tengo traumas.
-Pues tus miedos.
-Yo no le tengo miedo a nada.
-Mentira.- dijo Nieves.- Saca tus trapos sucios.
Les trajeron la cena y empezaron a cenar.
-Bueno, pues mi trauma es... La oscuridad con más gente.
-¿Cómo?- Dijo Carlos.
-Pues estar a oscuras con más gente.
-De normal es al revés.
-Es que de pequeña me dejaron a oscuras con mis primos y me daban sustos- Se quejó Laura- Vosotros haríais lo mismo.
Cap. 134
Nieves le miró y le hecho una mirada fulminante.
-Vale, allá voy -dijo Nieves convencida- No, no puedo.
-Venga, va, yo te ayudo -le ofreció Carlos.
Nieves bajo con la ayuda de Carlos, cuando bajó se puso a bailar.
-SIIIIII, HE BAJADOOO. VAMOOOOOS. Soy una machota -decía mientras bailaba, miró a Laura y Álvaro y vio que le estaban mirando muy raro, paró de repente.
-Venga va, sombreritos, ahora tú -le dijo Álvaro.
-Es que.. aquí hay una vista muy buena -dijo Carlos
-MARCO, baja aquí -le ordenó Nieves.
-Pues tiramos tu sombrero a la basura -ayudó Laura.
-Vale, vale, ya voy
Carlos no muy seguro bajó, cuando puso los pies en tierra suspiro aliviado.
-Gracias por no soltar la escalera -les dijo a Álvaro y Laura.
-Toma tu gorro -le dio el gorro Laura.
-Gracias -se lo puso- Ya soy yo.
Los cuatro empezaron a andar, parecía que a los chicos ya se les había pasado un poco el enfado.
-Es que no lo entiendo -reía Carlos- ¿Por qué te da miedo?
-Es así de lista -dijo Laura.
-Es un trauma infantil ¿vale? -contestó Nieves.
-Ya verás que trauma más raro -dijo Álvaro.
-Pues veréis... cuando yo tenía 5 años, era muy mona yo, me compraron una Barbie que llevaba meses pidiéndole a mis padres. Entonces, nos subimos al terrao de mi abuela y yo iba con mi Barbie, entonces me asomé y se me cayó, y un perro que pasaba por allí se la comió y la destrozó.
Los otros tres se miraron y se empezaron a reír.
-¿Qué pasa? Es mi trauma -les dijo Nieves.
Seguían riéndose.
-Pues yo también tengo un trauma -empezó a contar Álvaro.
-Espera, ¿cenamos en este bar y Álvaro nos cuenta su trauma? -preguntó Carlos
-Vale, allá voy -dijo Nieves convencida- No, no puedo.
-Venga, va, yo te ayudo -le ofreció Carlos.
Nieves bajo con la ayuda de Carlos, cuando bajó se puso a bailar.
-SIIIIII, HE BAJADOOO. VAMOOOOOS. Soy una machota -decía mientras bailaba, miró a Laura y Álvaro y vio que le estaban mirando muy raro, paró de repente.
-Venga va, sombreritos, ahora tú -le dijo Álvaro.
-Es que.. aquí hay una vista muy buena -dijo Carlos
-MARCO, baja aquí -le ordenó Nieves.
-Pues tiramos tu sombrero a la basura -ayudó Laura.
-Vale, vale, ya voy
Carlos no muy seguro bajó, cuando puso los pies en tierra suspiro aliviado.
-Gracias por no soltar la escalera -les dijo a Álvaro y Laura.
-Toma tu gorro -le dio el gorro Laura.
-Gracias -se lo puso- Ya soy yo.
Los cuatro empezaron a andar, parecía que a los chicos ya se les había pasado un poco el enfado.
-Es que no lo entiendo -reía Carlos- ¿Por qué te da miedo?
-Es así de lista -dijo Laura.
-Es un trauma infantil ¿vale? -contestó Nieves.
-Ya verás que trauma más raro -dijo Álvaro.
-Pues veréis... cuando yo tenía 5 años, era muy mona yo, me compraron una Barbie que llevaba meses pidiéndole a mis padres. Entonces, nos subimos al terrao de mi abuela y yo iba con mi Barbie, entonces me asomé y se me cayó, y un perro que pasaba por allí se la comió y la destrozó.
Los otros tres se miraron y se empezaron a reír.
-¿Qué pasa? Es mi trauma -les dijo Nieves.
Seguían riéndose.
-Pues yo también tengo un trauma -empezó a contar Álvaro.
-Espera, ¿cenamos en este bar y Álvaro nos cuenta su trauma? -preguntó Carlos
Cap.133
Laura miró hacia arriba y vio a Nieves.
-¡QUÉ!- Respondió.
-Cómo gritas...-dijo Álvaro.
-Calla que no la oigo.
-QUE SUJETES LA ESCALERA.
-¿QUÉ SI TENGO PERAS? PUES SÍ, DOS BIEN BONITAS.
Nieves se tapó la cara con las manos. ¿Se podía ser más tonta?
-Creo que no hablaba de tus tetas- Sugirió Álvaro.
-¿Tú has oído algo claro?
-No
-Pues ya está
Carlos se asomó y se le calló el gorro.
-¡Mi gorro!- Gritó
-¿Ves? Por eso no me gustan los bordes- dijo Nieves cruzada de brazos.
Álvaro cogió el sombrero de Carlos.
-AMIGO, EL SOMBRERO
-NO ME DIGAS- Respondió el rubio.
-NOS VAMOS
-NOOOOOOOO- Nieves y Carlos se asomaron a la vez.- SUJETAR LA ESCALERA.
-¿Lo ves? Dicen algo de las peras.- dijo Laura.
-¿Cómo van a hablar de peras?
-Échale imaginación.- Dijo Laura subiendo los hombros.
-Te lo juro, los mato- Nieves sacó su móvil y le envió un SMS a Laura.
-Anda, mira. Dicen "idiotas, sujetar la ESCALERA"- Recalcó la última palabra.
-Peras...- Murmuró el chico sujetando un lado de la escalera.
-Pues podría ser.- Laura le hizo cara de burla y sorprendentemente el chico se la correspondió, pero se aclaró la voz y se puso serio.
-Usted primero- Dijo Carlos
-No, tú primero, yo no me fío de esos dos.
-Las damas siempre van primero..- insistía Carlos que tampoco se fiaba mucho.
-¡QUÉ!- Respondió.
-Cómo gritas...-dijo Álvaro.
-Calla que no la oigo.
-QUE SUJETES LA ESCALERA.
-¿QUÉ SI TENGO PERAS? PUES SÍ, DOS BIEN BONITAS.
Nieves se tapó la cara con las manos. ¿Se podía ser más tonta?
-Creo que no hablaba de tus tetas- Sugirió Álvaro.
-¿Tú has oído algo claro?
-No
-Pues ya está
Carlos se asomó y se le calló el gorro.
-¡Mi gorro!- Gritó
-¿Ves? Por eso no me gustan los bordes- dijo Nieves cruzada de brazos.
Álvaro cogió el sombrero de Carlos.
-AMIGO, EL SOMBRERO
-NO ME DIGAS- Respondió el rubio.
-NOS VAMOS
-NOOOOOOOO- Nieves y Carlos se asomaron a la vez.- SUJETAR LA ESCALERA.
-¿Lo ves? Dicen algo de las peras.- dijo Laura.
-¿Cómo van a hablar de peras?
-Échale imaginación.- Dijo Laura subiendo los hombros.
-Te lo juro, los mato- Nieves sacó su móvil y le envió un SMS a Laura.
-Anda, mira. Dicen "idiotas, sujetar la ESCALERA"- Recalcó la última palabra.
-Peras...- Murmuró el chico sujetando un lado de la escalera.
-Pues podría ser.- Laura le hizo cara de burla y sorprendentemente el chico se la correspondió, pero se aclaró la voz y se puso serio.
-Usted primero- Dijo Carlos
-No, tú primero, yo no me fío de esos dos.
-Las damas siempre van primero..- insistía Carlos que tampoco se fiaba mucho.
Cap. 132
-Ay que se cae -dijo Nieves tapándose los ojos- Es que, en serio, no puedo ver a la gente en los bordes -seguía con las manos en la cara.
Carlos le miró tiernamente.
-Bueno, vamos a seguir barriendo sino no nos vamos nunca -dijo Carlos.
-Ojala me quedará toda la vida aquí contigo -susurró Nieves.
-¿Has dicho algo? -le preguntó Carlos.
-No, no, nada. Es que me he acordado de una canción y he empezado a cantarla.
-¿Cuál?
-Someone like you de Adele
-Me encanta esa canción
//En los baños//
-Bueno yo ya he acabado -dijo Álvaro vaciando el cubo.
-Espera que yo aún no he acabado.
-Ya bueno ¿y?
-Que me esperes, no me vas a dejar aquí sola.
-¿Por qué no?
-Porque no, me da miedo estar sola.
-Bueenooo vale -dijo Álvaro no muy convencido.
Laura terminó de limpiar los cristales y se fueron los dos juntos, cuando..
//En una azotea//
-¡M*erda! -dijo Carlos- serán cabr*nes.
-¿Qué pasa? -preguntó Nieves.
-Se han ido, voy a bajar.
-Si claro -le dijo Nieves mientras le agarraba del brazo.
-¿Por qué no?
-Porque no, porque no hay nadie abajo y se puede caer la escalera. Que no, que no. Que te puedes caer
-Entonces ¿qué hacemos?
Nieves vio a Laura que salía que Álvaro
-¡LAURA! -gritó Nieves
Carlos le miró tiernamente.
-Bueno, vamos a seguir barriendo sino no nos vamos nunca -dijo Carlos.
-Ojala me quedará toda la vida aquí contigo -susurró Nieves.
-¿Has dicho algo? -le preguntó Carlos.
-No, no, nada. Es que me he acordado de una canción y he empezado a cantarla.
-¿Cuál?
-Someone like you de Adele
-Me encanta esa canción
//En los baños//
-Bueno yo ya he acabado -dijo Álvaro vaciando el cubo.
-Espera que yo aún no he acabado.
-Ya bueno ¿y?
-Que me esperes, no me vas a dejar aquí sola.
-¿Por qué no?
-Porque no, me da miedo estar sola.
-Bueenooo vale -dijo Álvaro no muy convencido.
Laura terminó de limpiar los cristales y se fueron los dos juntos, cuando..
//En una azotea//
-¡M*erda! -dijo Carlos- serán cabr*nes.
-¿Qué pasa? -preguntó Nieves.
-Se han ido, voy a bajar.
-Si claro -le dijo Nieves mientras le agarraba del brazo.
-¿Por qué no?
-Porque no, porque no hay nadie abajo y se puede caer la escalera. Que no, que no. Que te puedes caer
-Entonces ¿qué hacemos?
Nieves vio a Laura que salía que Álvaro
-¡LAURA! -gritó Nieves
Cap.131
-Pues sí que está alto...- Dijo Carlos asomándose un poco.
-A ver si te caes- Nieves le cogió la mano en un instinto. Los dos se miraron y ella lo soltó.- Es que me da mucha cosa ver a la gente tan cerca de... Los bordes. Parece que se vayan a caer.
-Suele pasar.
Siguieron barriendo.
//En los baños//
-En serio, ¿Para ésto venís las chicas al baño?- dijo Blas limpiando un rallajo de la pared- La morena toh resuh y su rubika 100pre- leyó.
-Mis ojos- Dijo Laura mirando a otro sitio.
Edu y su amigo se habían largado ¿A dónde? ¿Qué más daba?
//En la azotea//
Se había levantado mucho aire. Carlos notó que Nieves tenía frío y es que además, a principio de octubre se hacía bastante pronto de noche. Se quitó la chaqueta y se la ofreció aún serio.
-¿La quieres?
-No... No.
-Hasta que no te la pongas me voy al borde- Empezó a caminar.
-¡Espera! Me la pongo.
Se puso la chaqueta de Carlos, que le venía un poco grande pero le daba igual, además de calentita, olía a él.
-Mira, desde aquí se ve la ventana del baño de chicas de primaria- dijo Nieves.
//En el baño//
-Ale, las ventanas- Blas le pasó a Laura el líquido y el paño.
-¿Estás de coña? ¿Y si me caigo?- Se quejó ella.
-Yo sólo sé que he hecho mi parte. Hasta mañana- Se fue sonriente.
Álvaro seguía fregando el suelo, aunque no lo hacía especialmente bien. Laura abrió la ventana. Empezaba a hacer frío y no tardaría mucho en hacerse de noche. Alguien gritó su nombre. Se giró y era Nieves desde la azotea. Se saludaron.
-Podrías trabajar- dijo Álvaro escurriendo el mocho.
-Ya voy- Respondió seca. Se sentó en el marco de la ventana y empezó a limpiar los cristales.
-A ver si te caes- Nieves le cogió la mano en un instinto. Los dos se miraron y ella lo soltó.- Es que me da mucha cosa ver a la gente tan cerca de... Los bordes. Parece que se vayan a caer.
-Suele pasar.
Siguieron barriendo.
//En los baños//
-En serio, ¿Para ésto venís las chicas al baño?- dijo Blas limpiando un rallajo de la pared- La morena toh resuh y su rubika 100pre- leyó.
-Mis ojos- Dijo Laura mirando a otro sitio.
Edu y su amigo se habían largado ¿A dónde? ¿Qué más daba?
//En la azotea//
Se había levantado mucho aire. Carlos notó que Nieves tenía frío y es que además, a principio de octubre se hacía bastante pronto de noche. Se quitó la chaqueta y se la ofreció aún serio.
-¿La quieres?
-No... No.
-Hasta que no te la pongas me voy al borde- Empezó a caminar.
-¡Espera! Me la pongo.
Se puso la chaqueta de Carlos, que le venía un poco grande pero le daba igual, además de calentita, olía a él.
-Mira, desde aquí se ve la ventana del baño de chicas de primaria- dijo Nieves.
//En el baño//
-Ale, las ventanas- Blas le pasó a Laura el líquido y el paño.
-¿Estás de coña? ¿Y si me caigo?- Se quejó ella.
-Yo sólo sé que he hecho mi parte. Hasta mañana- Se fue sonriente.
Álvaro seguía fregando el suelo, aunque no lo hacía especialmente bien. Laura abrió la ventana. Empezaba a hacer frío y no tardaría mucho en hacerse de noche. Alguien gritó su nombre. Se giró y era Nieves desde la azotea. Se saludaron.
-Podrías trabajar- dijo Álvaro escurriendo el mocho.
-Ya voy- Respondió seca. Se sentó en el marco de la ventana y empezó a limpiar los cristales.
Cap. 130
//Mientras en la azotea//
-Esto está muy alto -dijo Nieves desde arriba.
-No seas cagueta -le dijo David.
-No voy a hacerlo yo todo sola.
-Sube Carlos -le dijo David.
-¿Yo? -dijo el aludido
-Sí, tú ¿hay otra Carlos, rubio y con sombreros? No, pues entonces sí eres tú.
-Creo que es una mala idea -dijo Borja
-No, no es una mala idea -dijo Carlos mientras empezaba a subir.
Cuando Carlos subió, Nieves se sorprendió.
-Pensaba que iba a subir otro -dijo Nieves.
-Pues perdona, pero si quieres me voy.
-No te he dicho que te vayas -los dos empezaron a barrer.
//En los baños//
-Que asco -dijo Laura cogiendo una estensión que había en el suelo.
Álvaro se río.
-¿Te has reído? -le preguntó Laura, en cuánto Álvaro lo escuchó se puso serio otra vez.
Álvaro cogió la bolsa de basura de la papelera, miró.
-¿Qué miras?
-Que asco, está lleno de tampones.
-Mira amigo -le dijo cogiéndole del hombro- Las mujeres tenemos la regla, por si no lo sabías
Laura y Álvaro miraron la mano de Laura, ella no se había dado cuenta le había salido espontáneo.
-Esto está muy alto -dijo Nieves desde arriba.
-No seas cagueta -le dijo David.
-No voy a hacerlo yo todo sola.
-Sube Carlos -le dijo David.
-¿Yo? -dijo el aludido
-Sí, tú ¿hay otra Carlos, rubio y con sombreros? No, pues entonces sí eres tú.
-Creo que es una mala idea -dijo Borja
-No, no es una mala idea -dijo Carlos mientras empezaba a subir.
Cuando Carlos subió, Nieves se sorprendió.
-Pensaba que iba a subir otro -dijo Nieves.
-Pues perdona, pero si quieres me voy.
-No te he dicho que te vayas -los dos empezaron a barrer.
//En los baños//
-Que asco -dijo Laura cogiendo una estensión que había en el suelo.
Álvaro se río.
-¿Te has reído? -le preguntó Laura, en cuánto Álvaro lo escuchó se puso serio otra vez.
Álvaro cogió la bolsa de basura de la papelera, miró.
-¿Qué miras?
-Que asco, está lleno de tampones.
-Mira amigo -le dijo cogiéndole del hombro- Las mujeres tenemos la regla, por si no lo sabías
Laura y Álvaro miraron la mano de Laura, ella no se había dado cuenta le había salido espontáneo.
Cap.129
-No sé, Blas..- dijo Álvaro
-Oh, venga, no os hagáis los duros que sé muchas cosas- dijo sonriendo.
-Bueno, que sí, déjanos. Tenemos que reservar energías para limpiar- dijo Carlos.
Cuando acabaron las clases de la tarde los castigados se reunieron en el patio, entonces llegó la directora con unas mujeres de la limpieza y el conserje.
-Bien.- Empezó Merche- Como sois 10, ayudaréis 5 y 5 a cada sector. Laura, Álvaro, Blas, Edu y Fabián, vosotros ayudaréis al servicio de limpieza. Nieves, Carlos, David, Borja y Juanjo, vosotros al encargado de mantenimiento.
Los dos grupos se fueron detrás de quien les había tocado. En el grupo de la limpieza empezaron por los baños. La mujer sacó varios pares de guantes.
-Dar gracias a que solo tenéis que limpiar los espejos y las pilas.
Les dio balletas y limpia cristales.
Mientras tanto, el otro grupo fue cargado con un palo, una bolsa de basura y unas escaleras, además de guantes.
-Tenéis que subir a las azoteas y quitar todas las hojas. Además lo que haya también por ahí. Y no os olvideis de los canalones.
//En los baños de primaria//
-Que asco..- Murmuraba Álvaro limpiando un espejo lleno de pinta labios rojo.- Lo guarras que son algunas...
Laura le miró y el levantó los hombros. No se lo decía a ella, si se daba por aludida...
Mientras tanto, el otro grupo volvía a discutir sobre quien se subiría por las escaleras de hierro a la azotea.
-Yo prefiero que vayamos todos juntos- dijo Nieves, ya que todos le decían a ella que subiera.
-No, creo que no- dijo Borja.
Al final Nieves empezó a subir las escaleras, ¿Qué estaba haciendo? Madre mía, estaba bastante alta... No pensaba que sus compañeros de ahí abajo fueran capaces de empujar la escalera... Si de hecho la estaban sujetando aunque tampoco se podía fiar mucho.
-Tío, me huelen las manos fatal- dijo Edu quitándose el guante.
-Eso será más por no ducharte que por ésto- dejó caer Blas, que acababa de limpiar una pila y rellenar el jabón.-Y deja de quejarte y limpia.
-Ésto es injusto, yo no he hecho nada.- dijo Edu. Si las miradas matasen, Laura y Álvaro le hubieran asesinado en ese momento.
-Oh, venga, no os hagáis los duros que sé muchas cosas- dijo sonriendo.
-Bueno, que sí, déjanos. Tenemos que reservar energías para limpiar- dijo Carlos.
Cuando acabaron las clases de la tarde los castigados se reunieron en el patio, entonces llegó la directora con unas mujeres de la limpieza y el conserje.
-Bien.- Empezó Merche- Como sois 10, ayudaréis 5 y 5 a cada sector. Laura, Álvaro, Blas, Edu y Fabián, vosotros ayudaréis al servicio de limpieza. Nieves, Carlos, David, Borja y Juanjo, vosotros al encargado de mantenimiento.
Los dos grupos se fueron detrás de quien les había tocado. En el grupo de la limpieza empezaron por los baños. La mujer sacó varios pares de guantes.
-Dar gracias a que solo tenéis que limpiar los espejos y las pilas.
Les dio balletas y limpia cristales.
Mientras tanto, el otro grupo fue cargado con un palo, una bolsa de basura y unas escaleras, además de guantes.
-Tenéis que subir a las azoteas y quitar todas las hojas. Además lo que haya también por ahí. Y no os olvideis de los canalones.
//En los baños de primaria//
-Que asco..- Murmuraba Álvaro limpiando un espejo lleno de pinta labios rojo.- Lo guarras que son algunas...
Laura le miró y el levantó los hombros. No se lo decía a ella, si se daba por aludida...
Mientras tanto, el otro grupo volvía a discutir sobre quien se subiría por las escaleras de hierro a la azotea.
-Yo prefiero que vayamos todos juntos- dijo Nieves, ya que todos le decían a ella que subiera.
-No, creo que no- dijo Borja.
Al final Nieves empezó a subir las escaleras, ¿Qué estaba haciendo? Madre mía, estaba bastante alta... No pensaba que sus compañeros de ahí abajo fueran capaces de empujar la escalera... Si de hecho la estaban sujetando aunque tampoco se podía fiar mucho.
-Tío, me huelen las manos fatal- dijo Edu quitándose el guante.
-Eso será más por no ducharte que por ésto- dejó caer Blas, que acababa de limpiar una pila y rellenar el jabón.-Y deja de quejarte y limpia.
-Ésto es injusto, yo no he hecho nada.- dijo Edu. Si las miradas matasen, Laura y Álvaro le hubieran asesinado en ese momento.
Cap. 128
Las chicas le explicaron toda la historia un poco por encima, sin muchos detalles. Les mandó fuera a las dos chicas fuera y les dijo que se esperaran todos, que ahora les iba a imponer un castigo.
Las chicas salieron del despacho de la directora. Todos se giraron a mirarlas, pero ellas sólo miraron a Álvaro y Carlos. Esperaron un poco y al cabo de 2 o 3 minutos aproximadamente salió la directora del despacho..
-Vamos a ver -empezó a hablar la directora- visto lo visto, y lo que me habéis contado, vais a estar castigados TODOS limpiando el colegio, durante 1 semana. Y que no se vuelva a repetir. La próxima vez será durante 1 mes -la directora se volvió a meter a su despacho.
Cada uno se fue a su clase. Las clases pasaron rápido. Nadie se hablaba con Laura y Nieves. Hasta que alguien decidió hacerlo. Las dos chicas estaban sentadas en el suelo, un poco cabizbajas.
-Hola -saludó Blas.
Las dos chicas le miraron.
-¿Ya nos hablas? -preguntó Laura.
-Quiero que me expliquéis que pasó esa noche en mi casa.
Las chicas volvieron a explicarlo otra vez. Pero a él se lo explicaron con más detalles que a la directora.
La verdad es que él parecía entenderlas bastante, pero no estaban seguras.
Pasaron un grupo de chicas, se les quedaron mirando y empezaron a cuchichear.
-Esto va a ser igual todos los días -dijo Laura.
-Menuda fama estamos cogiendo en el colegio -dijo Nieves.
-No os preocupéis, la gente es así de chismosa -les dijo Blas- Además lo que a vosotras os tiene que importar es lo que piensen Álvaro y Carlos.
Los dos chicos se acercaron a la puerta. Pero no se acercaron a dónde estaban las chicas.
-Esperad, voy a hacer una cosa -dijo Blas.
Blas se levantó y se fue a donde estaban los chicos, habló con ellos.
Las chicas salieron del despacho de la directora. Todos se giraron a mirarlas, pero ellas sólo miraron a Álvaro y Carlos. Esperaron un poco y al cabo de 2 o 3 minutos aproximadamente salió la directora del despacho..
-Vamos a ver -empezó a hablar la directora- visto lo visto, y lo que me habéis contado, vais a estar castigados TODOS limpiando el colegio, durante 1 semana. Y que no se vuelva a repetir. La próxima vez será durante 1 mes -la directora se volvió a meter a su despacho.
Cada uno se fue a su clase. Las clases pasaron rápido. Nadie se hablaba con Laura y Nieves. Hasta que alguien decidió hacerlo. Las dos chicas estaban sentadas en el suelo, un poco cabizbajas.
-Hola -saludó Blas.
Las dos chicas le miraron.
-¿Ya nos hablas? -preguntó Laura.
-Quiero que me expliquéis que pasó esa noche en mi casa.
Las chicas volvieron a explicarlo otra vez. Pero a él se lo explicaron con más detalles que a la directora.
La verdad es que él parecía entenderlas bastante, pero no estaban seguras.
Pasaron un grupo de chicas, se les quedaron mirando y empezaron a cuchichear.
-Esto va a ser igual todos los días -dijo Laura.
-Menuda fama estamos cogiendo en el colegio -dijo Nieves.
-No os preocupéis, la gente es así de chismosa -les dijo Blas- Además lo que a vosotras os tiene que importar es lo que piensen Álvaro y Carlos.
Los dos chicos se acercaron a la puerta. Pero no se acercaron a dónde estaban las chicas.
-Esperad, voy a hacer una cosa -dijo Blas.
Blas se levantó y se fue a donde estaban los chicos, habló con ellos.
Cap.127
-¿Pero qué coñ* haces?- dijo Borja tapándose la mejilla enrojecida con la mano.- Serás zorr*...
-Como le vuelvas a insultar te voy a meter una patada en la boca, gilipoll*s- Entre Blas y David sujetaron a Carlos.
-Ah claro- dijo Edu- Vosotros les decís de todo en la fiesta y no pasa nada, ahora él le dice la verdad y se monta la de Dios.
-Pues ya puestos a decir la verdad- dijo Laura empezando a enfadarse- Eres un egocéntrico y
Laura no pudo acabar la frase porque le cogió por la cintura y le beso. Intentó meterle la lengua hasta la garganta, ella consiguió deshacerse de él y siguió el ejemplo de su amiga.
-Vale, ya estoy harto- Álvaro, al que no sujetaba ninguno fue a por Edu pero dos de sus amigos se pusieron por el medio.
Entonces Blas y David decidieron soltar a Carlos para ayudar a Álvaro, y al final acabaron todos en medio de la pelea. Sólo en ese momento en el que estaba prácticamente todo el colegio en corrito, algunos apoyando a sus ídolos de Youtube, otros a los mayores y los acoplados metiendo cizaña, dos profesores entraron y consiguieron separarlos.
-¡Los ocho al despacho de la directora!- Gritó uno de ellos- Y ustedes dos, señoritas, también.
Laura y Nieves entraron con el resto de alumnos y se fueron al despacho de la directora. Iban entrando uno a uno, por lo que los demás se quedaban sentados apoyados en la pared en silencio o mirándose mal entre ellos.
-Tío, te vuelve a sangrar el labio- le dijo David a Álvaro.
-No importa...
-No importa luego se la chupas a tu novio y se te pasa, Álvaro- dijo uno de los de bachillerato.
-No me hagas volver a pegarte una hosti*- Contestó Carlos a la defensiva.
-Niñato- Respondió el otro.
-SSSSSSSSSSSSSSSHHHHHHHH- Una profesora se asomó de la sala de profesores, les repasó uno por uno y cuando estuvieron callados volvió dentro.
Borja salió del despacho y se sentó.
-Te toca- le dijo a desgana a Blas.
El chico entró.
Cuando ya habían terminado con los interrogatorios a los chicos, la directora, Merche, llamó a las dos chicas a la vez dentro.
-A ver- dijo poniéndose las gafas, tenía ante ella un papel lleno de nombres y flechas y anotaciones- ¿Qué ha pasado?
-¿Por dónde empezamos?- dijo Laura.
-Por el principio.
-Como le vuelvas a insultar te voy a meter una patada en la boca, gilipoll*s- Entre Blas y David sujetaron a Carlos.
-Ah claro- dijo Edu- Vosotros les decís de todo en la fiesta y no pasa nada, ahora él le dice la verdad y se monta la de Dios.
-Pues ya puestos a decir la verdad- dijo Laura empezando a enfadarse- Eres un egocéntrico y
Laura no pudo acabar la frase porque le cogió por la cintura y le beso. Intentó meterle la lengua hasta la garganta, ella consiguió deshacerse de él y siguió el ejemplo de su amiga.
-Vale, ya estoy harto- Álvaro, al que no sujetaba ninguno fue a por Edu pero dos de sus amigos se pusieron por el medio.
Entonces Blas y David decidieron soltar a Carlos para ayudar a Álvaro, y al final acabaron todos en medio de la pelea. Sólo en ese momento en el que estaba prácticamente todo el colegio en corrito, algunos apoyando a sus ídolos de Youtube, otros a los mayores y los acoplados metiendo cizaña, dos profesores entraron y consiguieron separarlos.
-¡Los ocho al despacho de la directora!- Gritó uno de ellos- Y ustedes dos, señoritas, también.
Laura y Nieves entraron con el resto de alumnos y se fueron al despacho de la directora. Iban entrando uno a uno, por lo que los demás se quedaban sentados apoyados en la pared en silencio o mirándose mal entre ellos.
-Tío, te vuelve a sangrar el labio- le dijo David a Álvaro.
-No importa...
-No importa luego se la chupas a tu novio y se te pasa, Álvaro- dijo uno de los de bachillerato.
-No me hagas volver a pegarte una hosti*- Contestó Carlos a la defensiva.
-Niñato- Respondió el otro.
-SSSSSSSSSSSSSSSHHHHHHHH- Una profesora se asomó de la sala de profesores, les repasó uno por uno y cuando estuvieron callados volvió dentro.
Borja salió del despacho y se sentó.
-Te toca- le dijo a desgana a Blas.
El chico entró.
Cuando ya habían terminado con los interrogatorios a los chicos, la directora, Merche, llamó a las dos chicas a la vez dentro.
-A ver- dijo poniéndose las gafas, tenía ante ella un papel lleno de nombres y flechas y anotaciones- ¿Qué ha pasado?
-¿Por dónde empezamos?- dijo Laura.
-Por el principio.
Cap. 126
//Mientras por otro sitio//
Nieves no había podido convencer a Carlos para irse los dos solo, pero al parecer Borja no tenía muchos ánimos de irse solo. Los tres iban en silencio, Carlos un poco más rápido que ellos dos, pero tampoco tanto.
-Oye, esta tarde quedamos y repetimos, ¿eh? -le dijo Borja a Nieves, ella ni le contestó- Venga no te pongas así, mujer, si tienes tantas ganas vamos ahora a mi casa y en un momento -Borja se acercó a Nieves y empezó a darle pequeños besos por el cuello. Carlos no podía más, estaba a punto de reventar.
Cuando los tres giraron la esquina, vieron a Álvaro rodeado de cuatro tíos, uno de ellos era Edu.
-¿Qué pasa, Alvarito? ¿Ya no eres tan valiente, verdad? -le preguntó uno de los chicos.
-Éste que va a ser valiente -dijo Edu- pero si su novia le dejó para acostarse conmigo -los otros tres chicos se rieron.
-Sabes que eso es mentira -le dijo Álvaro con odio.
Carlos se acercó al grupo y Borja también.
-¿Qué pasa? -le preguntó Carlos a Álvaro.
-Os dijimos que nos las ibais a pagar, pues ya está -dijo Borja.
-Lo de acostarnos con vuestras novias no estaba en nuestros planes pero nos ha salido bien -dijo Edu con una sonrisa.
Blas y David se unieron al grupo.
-Se acabó -dijo Nieves entrando al corrito.
-NIEVES -le llamó Laura, pero ella entró.
-Vosotros -dijo señalando a los tíos incluidos a Edu y a Borja- Que no se os pase por la cabeza ponerles una mano encima a ninguno -dijo Nieves amenazante.
-Mirad, a esta me la he tirado yo -dijo Borja y sus amigos le chocaron la mano.
Laura se metió en el corrillo
-Mira, Borjita, llevo muchos días aguantándome las ganas -Nieves se acercó a Borja.
-Aquí no me morrees -Nieves le pegó una hostia, pero bastante fuerte-
-Uuuuhhh -dijeron sus amigotes
Nieves no había podido convencer a Carlos para irse los dos solo, pero al parecer Borja no tenía muchos ánimos de irse solo. Los tres iban en silencio, Carlos un poco más rápido que ellos dos, pero tampoco tanto.
-Oye, esta tarde quedamos y repetimos, ¿eh? -le dijo Borja a Nieves, ella ni le contestó- Venga no te pongas así, mujer, si tienes tantas ganas vamos ahora a mi casa y en un momento -Borja se acercó a Nieves y empezó a darle pequeños besos por el cuello. Carlos no podía más, estaba a punto de reventar.
Cuando los tres giraron la esquina, vieron a Álvaro rodeado de cuatro tíos, uno de ellos era Edu.
-¿Qué pasa, Alvarito? ¿Ya no eres tan valiente, verdad? -le preguntó uno de los chicos.
-Éste que va a ser valiente -dijo Edu- pero si su novia le dejó para acostarse conmigo -los otros tres chicos se rieron.
-Sabes que eso es mentira -le dijo Álvaro con odio.
Carlos se acercó al grupo y Borja también.
-¿Qué pasa? -le preguntó Carlos a Álvaro.
-Os dijimos que nos las ibais a pagar, pues ya está -dijo Borja.
-Lo de acostarnos con vuestras novias no estaba en nuestros planes pero nos ha salido bien -dijo Edu con una sonrisa.
Blas y David se unieron al grupo.
-Se acabó -dijo Nieves entrando al corrito.
-NIEVES -le llamó Laura, pero ella entró.
-Vosotros -dijo señalando a los tíos incluidos a Edu y a Borja- Que no se os pase por la cabeza ponerles una mano encima a ninguno -dijo Nieves amenazante.
-Mirad, a esta me la he tirado yo -dijo Borja y sus amigos le chocaron la mano.
Laura se metió en el corrillo
-Mira, Borjita, llevo muchos días aguantándome las ganas -Nieves se acercó a Borja.
-Aquí no me morrees -Nieves le pegó una hostia, pero bastante fuerte-
-Uuuuhhh -dijeron sus amigotes
Cap.125
-No te preocupes, que me voy- repitió el rubio.
-Me voy contigo- dijo ella sin siquiera mirar a Borja
-No, quédate con él.
-No.
-Me encanta cuando hacéis como que no estoy delante- dijo finalmente Borja. Cogió a Nieves por los hombros.- Tengo ganas de repetir, ¿Cuándo te viene bien?
Carlos enfadado se dio la vuelta y empezó a caminar, no quería seguir oyendo más mentiras.
Laura iba con un poco más de prisa que de costumbre a clase ya que tenía que copiarse rápido los ejercicios de historia antes de que llegara la profesora, y sin David de su parte, sólo le quedaba Nieves. Entonces al girar la esquina se chocó con Álvaro.
-¿Qué haces aquí?- dijo enfadado.
-Ir al colegio, ¿Qué voy a hacer?
Él no contestó, se puso a andar hacia el colegio. Entonces apareció Edu con la mochila en un hombro solo. Pasó por al lado de Álvaro sonriendo.
-¡Laura!
Pero ella le ignoró y siguió caminando pocos pasos por detrás de Álvaro, el cual estaba poniendo la oreja para enterarse un poco de la conversación.
-¿Qué pasa? ¿Es que te hice demasiado daño anoche? Pero tampoco tienes que dejar de hablarme por eso.
-Cállate- dijo Laura- ¡Cállate!
-Pero si aún te queda voz después de haber chillado tanto anoche, vaya...
-Que te calles, ¡EDU CÁLLATE!
Toda la calle se quedó en silencio, pocas veces Laura había gritado tanto. Álvaro incluso se giró para ver que todo iba bien.
-No tienes idea del marrón en el que me has metido, tú y tu amigo- le dijo al chico.
-Porque os queremos.
Laura se rió irónica.
-No me hagas hablar bonito.
-A ver Laura...- El chico le puso la mano en el hombro.
-Que no me toques.
-¿Por qué, eh?
-Que no la toques, te lo acaba de decir- Álvaro se había parado y estaba mirándolos. Edu sonrió satisfecho.
Entonces en la puerta del colegio pasó algo no muy habitual
Cap. 124
Nieves se quedó mirando la pantalla de su BlackBerry, no sabía que decir ni que hacer. Al igual que Laura, ésta llamó a su amiga.
-¿Sí? -contestó Nieves.
-¿Has leído el mensaje? -le preguntó su amiga directamente.
-Sí
-¿Lo vas a ver?
-No sé
-Yo tampoco
Las amigas hablaron de poco más en el móvil. Laura colgó y se quedo pensando en si verlo o no. Al final decidió que sí. La canción se llama "Still". Nieves también decidió que sí que la iba a escuchar, se metió al canal de Auryn y escuchó al canción, ya que no tenía videoclip. La canción era realmente preciosa, a las dos chicas les encantaba. No sabían al cien por cien si la habían hecho para ellas, pero dudaban que sí. Las dos estuvieron llorando en su casa. Laura tumbada en la cama boca abajo, Álvaro era un idiota y le había dolido muchisímo lo que le habia dicho en el tren, pero aún sentía cosas por él y no lo entendía. Nieves estaba apoyada en una de las paredes de su habitación, no dejaba de mirar la foto en la que Carlos le estaba besando, no entendía porque no le creía.
Al día siguiente, Carlos bajó de su casa para irse al instituto y vió a alguien que desearía no volver a ver en su vida.
-¿Qué haces aquí? -le preguntó.
-Voy a volver a enseñarle a Nieves lo que es un hombre de verdad -dijo Borja guiñandóle un ojo.
-¿Te crees que estoy celoso?
-Tú sabrás, yo la disfruto y la hago sentir mujer -le dijo Borja- ¿Tú que le dabas?
Carlos se quedo pensando, en ese momento Nieves abrió la puerta de su patio.
-¿Qué haceís vosotros aquí? -preguntó Nieves.
-Yo, ya nada -le dijo Carlos- Siento haber molestado -el chico empezó a andar.
-CARLOS -le llamó Nieves, él chico se giró.
Cap.123
Volvieron a casa enfadadas, se acostaron y a la mañana siguiente Laura se volvió temprano a su casa. En no que quedó de fin de semana no hicieron nada.
El lunes fueron solas a clase ya que Álvaro y Carlos no fueron a por ellas. Cuando Nieves llegó sólo estaban Blas y David hablando en un rincón pero no le saludaron.
-Que majos que son todos.- murmuró mientras se sentaba.
Laura llegó a clase y dejó la mochila enfadada en la mea.
-Hola- dijo seca.
-Hola- Nieves le respondió igual.
Entonces Carlos entró, las miró y siguió para delante con Blas y David. Pronto llegaron también Dani y Ana que las ignoraron. Casi cuando iba a sonar el timbre llegó Álvaro, que les fulminó con la mirada y siguió caminando.
La clase de matemáticas pasó en silencio, lugo en EF nadie se quiso poner con ellas.
En el patio vieron como un corro de chicas acosaban a los chicos Auryn.
-Os merecéis algo mejor- dijo una rubia cogiendo a Carlos por la cintura.
Nieves se levantó enfadada y se metió en el grupito.
-Y que no sea alérgica.
-¿A qué?- dijo Álvaro molesto de verla allí.
-A toda la mierd* que meten las niñatas estas- miró a la chica rubia que cogía a Carlos.
Laura apareció y se llevó a su amiga del brazo. El resto del día lo pasaron aburridas y solas. Borja y Edu querían ir con ellas pero las chicas se negaron rotundamente ¡Era lo que les faltaba!
Por la tarde Nieves estaba en su casa mirando las fotos de la cámara, sobretodo la del beso con Carlos, entonces en la lista de Youtube sonó "conmigo". Empezó a llorar.
Laura, por su parte, estaba tumbada boca arriba en la cama. No le apetecía hacer nada de nada. Intentó ponerse a leer un libro para distraerse pero no servía de nada.
A las dos chicas les llegó el mismo SMS a la vez, de la misma persona con el mismo contenido. "Nueva canción de Auryn. Ya disponible en nuestro canal de Youtube. Blas" Sería uno de esos mensajes cadena pero había algo más: "Chicas, no estáis solas."
El lunes fueron solas a clase ya que Álvaro y Carlos no fueron a por ellas. Cuando Nieves llegó sólo estaban Blas y David hablando en un rincón pero no le saludaron.
-Que majos que son todos.- murmuró mientras se sentaba.
Laura llegó a clase y dejó la mochila enfadada en la mea.
-Hola- dijo seca.
-Hola- Nieves le respondió igual.
Entonces Carlos entró, las miró y siguió para delante con Blas y David. Pronto llegaron también Dani y Ana que las ignoraron. Casi cuando iba a sonar el timbre llegó Álvaro, que les fulminó con la mirada y siguió caminando.
La clase de matemáticas pasó en silencio, lugo en EF nadie se quiso poner con ellas.
En el patio vieron como un corro de chicas acosaban a los chicos Auryn.
-Os merecéis algo mejor- dijo una rubia cogiendo a Carlos por la cintura.
Nieves se levantó enfadada y se metió en el grupito.
-Y que no sea alérgica.
-¿A qué?- dijo Álvaro molesto de verla allí.
-A toda la mierd* que meten las niñatas estas- miró a la chica rubia que cogía a Carlos.
Laura apareció y se llevó a su amiga del brazo. El resto del día lo pasaron aburridas y solas. Borja y Edu querían ir con ellas pero las chicas se negaron rotundamente ¡Era lo que les faltaba!
Por la tarde Nieves estaba en su casa mirando las fotos de la cámara, sobretodo la del beso con Carlos, entonces en la lista de Youtube sonó "conmigo". Empezó a llorar.
Laura, por su parte, estaba tumbada boca arriba en la cama. No le apetecía hacer nada de nada. Intentó ponerse a leer un libro para distraerse pero no servía de nada.
A las dos chicas les llegó el mismo SMS a la vez, de la misma persona con el mismo contenido. "Nueva canción de Auryn. Ya disponible en nuestro canal de Youtube. Blas" Sería uno de esos mensajes cadena pero había algo más: "Chicas, no estáis solas."
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